El borrador estadounidense contempla limitaciones a la expansión de la coalición, reducción del tamaño del ejército ucraniano y reconocimiento de intereses territoriales de Rusia. Funcionarios europeos y ucranianos trabajan en ajustes que garanticen la soberanía de Ucrania, su derecho a la autodefensa y su futura membresía en la OTAN.
Durante la reunión se revisarán las ayudas militares actuales, incluyendo solicitudes adicionales de Ucrania para sistemas antiaéreos, y se destacará la importancia de la Lista de Prioridades de Ucrania (PURL) en la adquisición de armas. Los resultados de esta reunión sentarán las bases para la cumbre que abordará disuasión a largo plazo, inversión en defensa y la relación futura con Ucrania.