(VOVworld) – George Sabra, fue electo ayer como el presidente del opositor Consejo Nacional de Siria tras discordantes reuniones en Doha, capital de Catar. El ex vocero de este principal grupo opositor declaró en la televisión Al Jazeera que trabajará a plena capacidad para aumentar las presiones sobre la administración del presidente Bashar al-Assad. Con las ayudas del Occidente y algunos países regionales, incluso Catar, los opositores sirios buscan presentarse unidos para tal fin.

Con antelación, el presidente al-Assad afirmó que no saldrá de Siria, y advirtió que las injerencias de Occidente en la crisis interna tendrá graves consecuencias para la seguridad y la estabilidad de la región. Rusia, China y otros países continúan condenando las intervenciones foráneas en esa república árabe.

En otro suceso relacionado, un diplomático japonés dijo que unos 150 delegados de 60 naciones participarán en un seminario internacional de este mes en Tokio para presionar al régimen de al-Assad. Entretanto, la cancillería turca informó que 8 mil sirios ingresaron en Turquía a causa de la violencia política en su país./.