Según la fuente, un ataque aéreo perpetrado ayer en la tarde contra un grupo de inmigrantes que se desplazaban desde el norte de la Franja de Gaza hacia el sur siguiendo las recomendaciones del ejército israelí, mató al menos a 70 personas e hirió a más de 200. Todas las víctimas eran civiles, incluidos muchos niños y mujeres.
Tanques israelíes cerca de la frontera de Israel con la Franja de Gaza el 12 de octubre. (Foto: Reuters)
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Desde el comienzo de la campaña aérea del ejército israelí contra Gaza, en la mañana del 7 de octubre, hasta la tarde del 13 de octubre, el total de bajas llegó a casi 10 mil personas.
Mientras tanto, este viernes en una serie de ciudades de Cisjordania se produjeron enfrentamientos entre manifestantes palestinos y soldados israelíes, que dejaron al menos 14 palestinos muertos y unos 300 heridos.
También ayer por la tarde el ejército israelí bombardeó un puesto avanzado del ejército libanés en la zona de Al Dhahira, en el sur del Líbano. Un proyectil de artillería golpeó a un grupo de reporteros internacionales que trabajaban allí, dejando a un camarógrafo de Reuters muerto e hiriendo a otros cuatro periodistas. Medios de comunicación regionales e internacionales han condenado enérgicamente este incidente sangriento.
Mientras, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se reunió la víspera con el presidente de Palestina, Mahmoud Abbas, en Ammán, la capital de Jordania. Blinken condenó los ataques de Hamás contra Israel y enfatizó que Hamás no representa la libertad, la justicia y la autodeterminación del pueblo palestino. El diplomático también reafirmó el compromiso de Estados Unidos de cooperar con Palestina en los esfuerzos por garantizar la seguridad de su pueblo.