En declaraciones a la televisión estatal, Maduro señaló que la llamada transcurrió en un clima de “respeto” y “cordialidad”, y aseguró que Caracas acoge con satisfacción cualquier paso que conduzca a un diálogo respetuoso, coherente con su compromiso con la paz. Trump también reconoció la conversación, aunque sin ofrecer detalles.
En los últimos meses, Estados Unidos ha reforzado de manera significativa su presencia militar en el Caribe, alegando operaciones contra presuntos criminales y actividades de narcotráfico vinculadas a Venezuela. Caracas rechaza estas acusaciones y las califica de “acciones desestabilizadoras” para la región.