Esta es solo la última señal de una grave crisis económica en el Líbano, con casi ningún crecimiento.
Con una deuda de 92 mil millones de dólares, alrededor del 170% del Producto Interno Bruto, el Líbano se encuentra entre los países más endeudanos del mundo. La economía estancada es una de las razones por las que se desató una ola de protestas recientemente en el país.