Así lo pronosticó un informe publicado el 28 de noviembre, según el cual, en el escenario “más positivo”, si Reino Unido mantiene un comercio sin barreras con la UE y no hay cambios en el principio de circulación libre entre las dos partes, la economía británica se reducirá a 0, 6%. Mientras tanto, si Londres y Bruselas mantienen un comercio sin barreras pero liquidan el mecanismo de libre comercio del trabajo, el PIB británico caerá un 2,1%.

Por otro lado, la primera ministra británica Theresa May dijo el 28 de noviembre que era poco probable que su país celebre un segundo referéndum sobre el Brexit antes de que abandone la UE, programado para el 29 de marzo. La promoción de un voto de este tipo retrasaría la salida de Gran Bretaña o aumentaría la posibilidad de que Londres salga del bloque continental sin ningún acuerdo. May enfatizó la necesidad de materializar la voluntad de los británicos en esta cuestión.