El documento aclaró además que el Gobierno de Irán está comprometido a defender el derecho del pueblo de celebrar reuniones pacíficas y también a proteger la seguridad de sus ciudadanos contra acciones violentas.
Por su parte, el ministro de Inteligencia iraní, Mahmoud Alavi declaró que las fuerzas de inteligencia de su país darán una dura respuesta a los grupos terroristas y antirrevolucionarios que operan en la región.