El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo. (Foto: Reuters) |
El anuncio se produjo después de un tiroteo en una zona desmilitarizada (DMZ) en la frontera intercoreana que ocurrió la mañana del mismo día.
Pompeo dijo que los disparos fueron “involuntarios” y que Estados Unidos todavía estaba persiguiendo “una misión invariable” de persuadir a Pyongyang para que abandonara sus armas nucleares.
El 3 de mayo, Corea del Norte realizó varios disparos contra un puesto de observación de Corea del Sur en la DMZ, lo que provocó que el Sur tomara represalias. Ninguna de las partes sufrió daños. Un funcionario surcoreano reveló que el tiroteo desde el norte no fue intencionado.