Según los estudiantes, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) canceló abrupta e ilegalmente su estatus en la base de datos del Sistema de Información de Estudiantes y Visitantes de Intercambio (SEVIS) del Gobierno, poniéndolos en riesgo de arresto, detención y deportación.
La denuncia inicial fue presentada por 17 estudiantes el 11 de abril en Georgia. Desde entonces, 116 personas se han unido a los demandantes.
El fin del SEVIS llega cuando el gobierno federal impone una serie de requisitos a las universidades y amenaza con recortar miles de millones de dólares en financiación federal.