(VOVWORLD) - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el 11 de febrero una orden ejecutiva para imponer un arancel del 25 % sobre todas las importaciones de acero y aluminio, con el objetivo de proteger a las empresas nacionales y garantizar la seguridad nacional.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó la orden ejecutiva en el Despacho Oval el 10 de febrero. (Foto: Reuters) |
Durante su anuncio en el Despacho Oval, el mandatario destacó que la medida se aplicará sin excepciones y entrará en vigor el 4 de marzo. Además, advirtió que el arancel podría incrementarse aún más en el futuro. Según Trump, esta política fortalecerá la industria manufacturera estadounidense, impulsará la producción interna y generará nuevos empleos en el país.
El secretario de Comercio, Howard Lutnick, aseguró que la iniciativa podría ayudar a recuperar aproximadamente 120 000 puestos de trabajo en Estados Unidos.
Junto con el nuevo arancel, Trump introdujo una regulación adicional, que exige que el acero y el aluminio importados sean "fundidos y moldeados" en América del Norte antes de su ingreso al mercado estadounidense.
El anuncio de Trump generó reacciones inmediatas en varios países. Desde Canadá, el ministro de Innovación, Francois-Philippe Champagne, afirmó que su país defenderá firmemente los intereses de sus trabajadores y su industria siderúrgica.
En Brasil, la prensa local informó que el gobierno evalúa imponer un nuevo impuesto a grandes corporaciones tecnológicas estadounidenses como Amazon, Meta y Alphabet (matriz de Google), en respuesta a la decisión de Washington.
Entretanto, el presidente interino de Corea del Sur, Choi Sang-mok, convocó una reunión con el Ministro de Industria y otros altos funcionarios para analizar el impacto de los aranceles y diseñar una estrategia de respuesta.
Por su parte, la Unión Europea advirtió que tomará medidas de represalia de inmediato si Estados Unidos implementa los nuevos aranceles.