Camiones que transportan mercancías esperan completar procedimientos de inspección en el puerto de Dover, en el sureste de Inglaterra. (Foto: AFP/VNA)

En concreto, a partir del 1 de enero, los importadores deben completar trámites aduaneros sobre las mercancías que ingresan al Reino Unido desde la UE u otros países. Las empresas ya no podrán retrasar la finalización de las declaraciones aduaneras de importación completas hasta por 175 días, una medida que se introdujo para hacer frente a la interrupción debido al Brexit.

Según esta entidad, las nuevas restricciones sobre productos animales y vegetales del bloque comunitario podrían causar retrasos significativos en los puertos durante el Año Nuevo, ya que algunos miembros de la cadena de suministro, en particular las empresas de logística del lado de la UE, podrían no estar preparados por los cambios.

Estas nuevas medidas requieren que las entidades completen la documentación correcta al menos cuatro horas antes de que las mercancías puedan llegar a las fronteras del Reino Unido, de lo contrario, serán devueltas. Además, los productos de origen animal y vegetal también deben ir acompañados de certificados de origen.