El Presidente de Estados Unidos celebra la apertura del mercado chino a empresas estadounidenses

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(VOVWORLD) - Tras dos días de negociaciones en Ginebra, Suiza, los gobiernos de Estados Unidos y China acordaron una reducción recíproca de aranceles durante un periodo de 90 días, con la intención de continuar las negociaciones posteriormente.

El Presidente de Estados Unidos celebra la apertura del mercado chino a empresas estadounidenses - ảnh 1El presidente de Estados Unidos, Donald Trump. (Foto: Reuters)

Según lo pactado, dicha nación norteamericana reducirá los aranceles sobre productos chinos del 145 % al 30 %, mientras que China rebajará los suyos del 125% al 10%. Esta medida entrará en vigor el 14 de mayo.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo: “Hemos reiniciado completamente las relaciones con China tras unas negociaciones muy efectivas en Ginebra. Ambas partes acordaron reducir los aranceles aplicados desde el 2 de abril a un 10 % durante 90 días. Mientras continúan las conversaciones sobre otros temas estructurales, quiero dejar claro que los aranceles actuales no incluyen los impuestos a automóviles, acero, aluminio ni posibles gravámenes a productos farmacéuticos"

Además, el inquilino de la Casa Blanca indicó que lo más importante es que China ha accedido a abrir su mercado a las empresas estadounidenses, aunque, según él, esto requerirá tiempo para ser formalizado. 

"Esta apertura permitirá a nuestras compañías competir en igualdad de condiciones y generará empleo en Estados Unidos”, enfatizó.

Trump añadió que podría mantener una conversación telefónica con su homólogo chino, Xi Jinping, el próximo fin de semana, y advirtió que, si no se logra un acuerdo tras los 90 días, aunque no se restablecerá el arancel del 145 %, los productos chinos seguirán enfrentando un gravamen considerable.

Previamente, las dos naciones emitieron una declaración conjunta en la que destacaron la importancia de una colaboración económica y comercial bilateral más sólida, sostenible y mutuamente beneficiosa, tanto para sus respectivas economías como para la global. Asimismo, acordaron establecer un mecanismo de diálogo continuo, que se celebrará alternativamente en China, Estados Unidos o en un tercer país.

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