La central nuclear de Zaporozhye en Ucrania. (Foto: TASS) |
Guterres también pidió a las fuerzas armadas de Rusia y de Ucrania que cesen de inmediato cualquier actividad militar en las inmediaciones de la central nuclear y que no utilicen las instalaciones y el entorno que la rodean como objetivo.
Asimismo, solicitó a todas las partes que retiren todo el personal y el equipo de la planta y limiten el despliegue de fuerzas y herramientas adicionales en esta instalación. En cambio, se necesita un acuerdo urgente a nivel técnico sobre un perímetro seguro de desmilitarización para garantizar la seguridad de la región.
Rusia convocó el mismo día una reunión informal de los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el estado actual de la planta de energía nuclear de Zaporozhie.
Por su parte, el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasily Nebenzya, expresó su preocupación por la seguridad internacional de la fábrica en el contexto de que esa área circundante fue intensamente bombardeada en las últimas semanas. Según la parte rusa, el ejército ucraniano ha atacado repetidamente la instalación.