(VOVworld) – El 4 de agosto, la administración del presidente Barack Obama emitió por primera vez un pronunciamiento sobre el Mar del Este, luego de que el Senado de Estados Unidos, aprobara una resolucion de enérgico apoyo a la Declaración de Conducta de las Partes Concernientes en esta zona marítima (DOC).

El documento presentado por el vocero del Departamento de Estado, Patrick Ventrell subrayó que como una nación ubicada en Asia- Pacífico, EEUU ve sus intereses nacionales en el mantenimiento de la paz y la estabilidad, el respeto a la ley internacional, la libre navegación y el comercio legal en el Mar Oriental.

EEUU expresó la convicción de que los países en la región coordinarán estrechamente y aplicarán medidas diplomáticas para resolver las disputas territoriales en el Mar Oriental sin recurrir a  las amenazas o al uso de la fuerza. EEUU manifestó además su preocupación ante las crecientes tensiones en la zona y presta atención a la situación en el Mar Oriental.

Los últimos hechos, incluidos altercados, presiones económicas, y los incidentes ocurridos en los alrededores del arrecife de Scarborough, en especial el otorgamiento por parte de China de la categoría administrativa de ciudad de Sansha y la instalación de un mando militar en esa localidad establecida ilegalmente en las zonas en disputa, van en contra de los esfuerzos diplomáticos en favor de la cooperacion para resolver los contenciosos, al tiempo que aumentan las tensiones en la región.

Washington instó a las partes involucradas  a emprender  pasos encaminados a tratar los diferendos según el espíritu de la Declaración de la ASEAN (Asociación de Naciones del Sudeste Asiático) sobre el Mar del Este de 1992 y la suscrita entre este bloque y China en 2002 sobre la Conducta de las Partes concernientes en esta zona marítima estratégica. EEUU ratifica además su respaldo a los esfuerzos de ASEAN para consolidar el consenso y controlar e impedir los conflictos.

Alienta a esta agrupación regional y China a elaborar un Código que riga los comportamientos de las naciones relacionadas en el Mar del Este, con principios y estipulaciones a favor de una solución pacífica de las disputas territoriales. Instó a las partes a ventilar  sus reclamaciones de soberanía de acuerdo con las leyes internacionales, incluida la Convención de la ONU de Derecho del Mar, vigente desde 1982.