Un niño gravemente desnutrido en un hospital de Mogadishu, Somalia. (Foto: AFP/VNA) |
Más de siete millones de niños menores de cinco años están desnutridos y necesitan asistencia nutricional de emergencia, mientras que más de 1,9 millones de niños y niñas corren el riesgo de morir por desnutrición severa.
Según el director regional de UNICEF para África Oriental y Meridional Mohamed Fall, durante los últimos tres años, las comunidades se han visto obligadas a tomar medidas extremas para sobrevivir, con millones de niños y familias que abandonan sus hogares desesperados en busca de alimentos y agua. Esta crisis ha privado a los pequeños de lo esencial de la infancia: suficiente para comer, tener un hogar, agua potable e ir a la escuela, agregó.
Además de las necesidades nutricionales, las condiciones climáticas extremas, la inseguridad y la escasez también han tenido consecuencias devastadoras para las mujeres y los niños, aumentando el riesgo de violencia de género, explotación y abuso sexuales. Importantes brotes de cólera, sarampión, malaria y otras enfermedades están causando estragos en la región, agravados por las condiciones climáticas extremas y el debilitamiento de los sistemas de salud, dijo Mohamed Fall.