Actualmente, en medio de un cerrado hermetismo, autoridades de ambas partes llevan a cabo los preparativos de este evento histórico.
Durante un encuentro con los dirigentes surcoreanos el mes pasado, Kim Jong-un se comprometió a cumplir la desnuclearización y expresó la esperanza de reunirse con el presidente estadounidense tal pronto como posible. Mientras, Donald Trump ya aceptó la invitación.