El misil balístico intercontinental Hwasong-14 lanzado exitosamente por Corea del Norte el 4 de julio de 2017 (Foto: YONHAP/VNA) |
En respuesta a esta acción, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres mostró su rechazo y la consideró como otra violación grave de la resolución de la mayor organización mundial, alimentando la escalada de la tensión regional.
El mismo día, Corea del Norte logró lanzar un misil bajo la supervisión de su líder Kim Jong-un y afirmó que ese proyectil guiado tiene la capacidad para transportar ojivas nucleares y alcanzar cualquier blanco en el mundo.
En otro hecho relacionado, Rusia y China llamaron a Corea del Norte, Corea del Sur y Estados Unidos a participar en un plan trazado para aliviar la tensión derivada de la cuestión nuclear de Pyongyang. La iniciativa fue concretada en la Declaración Conjunta alcanzada por Moscú y Beijing en la reunión entre el presidente de China, Xi Jinping y su homólogo de Rusia, Vladimir Putin en el Kremlin. En este sentido, ambos líderes exhortaron a Corea del Norte a abstenerse de su programa nuclear y de misiles mientras pidieron el fin de los ejercicios conjuntos de gran calibre entre Estados Unidos y Corea del Sur.