El primer ministro Pham Minh Chinh pronuncia un discurso en la ceremonia conmemorativa. (Foto: Van Hieu/VOV)

En el discurso pronunciado en el acto el primer ministro Pham Minh Chinh destacó que en las últimas 8 décadas, bajo la dirección del Partido Comunista y con el apoyo de la ciudadanía, el Gobierno vietnamita en los diferentes mandatos ha mostrado su alta determinación, sus grandes esfuerzos y su acción firme en el cumplimiento de los objetivos en todos los campos.

Además, puntualizó: “Los 80 años de existencia de nuestro Gobierno representan un camino con una sola meta, guiado por la solidaridad, la humanidad, la voluntad, el coraje, la confianza, la aspiración, el aprovechamiento del tiempo, la inteligencia y la decisión. En nombre del Gobierno, hago un llamado a todos los funcionarios, empleados públicos y trabajadores de la administración estatal a mantener el sentido de responsabilidad, servir con todo el corazón a la Patria y al pueblo, actuar con decisión y cumplir lo que prometen. A la población y al empresariado: ‘no digan que no, no digan que es difícil, no digan que lo harán y luego no lo hagan’. En el trabajo, hay que pensar, actuar, asumir la responsabilidad con valentía y buscar siempre el bien común. Todos los compatriotas y soldados en el país, los connacionales en el extranjero y la comunidad empresarial deben mantener el patriotismo, la autosuficiencia y la autonomía, así como continuar promoviendo la tradición de solidaridad, humanidad y empatía, colaborando con el Gobierno para construir un Vietnam democrático, próspero, progresista y feliz”.

El secretario general del Partido Comunista de Vietnam, To Lam, interviene en la ocasión. (Foto: Nhat Bac/VGP)

Mientras tanto, el secretario general del Partido Comunista de Vietnam, To Lam, afirmó que durante los últimos 80 años el aparato gubernamental, a lo largo de los diferentes períodos, ha sentado sólidas bases para la transformación del país. 

“La valiosa tradición de nuestro Gobierno puede resumirse en ocho palabras: coraje, disciplina, unidad, integridad, acción, creatividad, eficacia y espíritu de servicio. Coraje para mantenerse firme en medio de los cambios; disciplina para garantizar el funcionamiento fluido del sistema; unidad porque en ella reside la fuerza; integridad para ganar la confianza del pueblo; acción para convertir las resoluciones en realidad; creatividad para superar los desafíos; eficacia para elevar la calidad de vida de la población; y espíritu de servicio como rasgo indispensable para que todas las políticas apunten al objetivo supremo: la felicidad y la prosperidad de cada vietnamita”, recalcó To Lam.

El líder político también expresó la esperanza de que los delegados continúen intercambiando opiniones y transmitiendo el “arte de gobernar la nación” que se ha forjado durante mucho tiempo para conducir al país a la nueva era de desarrollo nacional.