El cohete lanzado desde el Líbano hacia Israel el 18 de octubre de 2024. (Foto: IRNA/VNA)

Según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el 20 de octubre, grupos armados en el Líbano dispararon más de 200 misiles contra la región norteña de Israel, registrando el día de ataque más intenso de Hezbolá contra esa nación hebrea en más de una semana.

El bombardeo más fuerte tuvo lugar este domingo, con unos 70 misiles hacia las zonas occidental y alta de Galilea. Antes y después de esta incursión, Hezbolá llevó a cabo varios bombardeos a menor escala en Galilea, el valle de Jezreel, la ciudad portuaria de Haifa y otra zona del norte de Israel. Estas acciones no causaron víctimas, pero provocaron una serie de grandes incendios y daños graves.

Por su parte, Hezbolá declaró que había disparado múltiples cohetes contra una instalación militar de dicho país hebreo al este de la ciudad de Safed con el objetivo de proteger, y responder a las incursiones de las FDI contra hogares y aldeas libanesas. En respuesta a esas embestidas, las fuerzas aéreas israelíes lanzaron bombardeos intensos contra blancos del grupo chií, tanto en el valle de Beqaa, en las afueras de la capital Beirut, como en el sur del país vecino.

Según los medios de Tel Aviv, el ejército del país ha pedido a los residentes de al menos 22 zonas del Líbano que se reubiquen para evitar daños. Mientras tanto, una fuente libanesa informó anoche que aviones de combate israelíes atacaron un lugar cerca del aeropuerto internacional de Beirut, el único aeródromo que aún funciona en ese territorio, lo que generó temores sobre el riesgo de cierre, provocando que las operaciones de aviación se paralizaran por completo.