Según la viceprimera ministra, Chrystia Freeland, las represalias canadienses entrarían en vigor después de un período de consultas sobre una larga lista detallada de productos que contienen aluminio.
Anteriormente, cuando visitó una fábrica en la ciudad de Clyde, estado estadounidense de Ohio, Trump anunció que había firmado una declaración sobre la retributación de los productos de aluminio canadienses. Acusó a Ottawa de destruir la referida industria de Washington y ser injusto con sus trabajadores.