“Teniendo en cuenta las actuales restricciones fiscales y presupuestarias, que deberán permanecer en un futuro próximo, y el proceso de transición para la recién elegida administración, que se iniciará el 1 de enero de 2019, el Gobierno brasileño se vio obligado a retirar su oferta para acoger la COP-25”, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores de gigante suramericano.
Mientras tanto, los grupos ecologistas dicen que la decisión está en línea con la intención del presidente electo Jair Bolsonaro. Durante su campaña electoral, Bolsonaro anunció que retiraría a Brasil del Acuerdo de París sobre el Cambio Climático si fuera elegido.