El accidente ocurrió a unas 10 millas náuticas de la Ciudad del Carmen, al suroeste de México, cuando el helicóptero realizaba una misión desde esa urbe en el estado de Campeche hacia una plataforma de perforación ubicada en el Golfo de México.
En el momento del incidente, solo había dos pilotos en el aparato y ningún pasajero. Actualmente, las autoridades están buscando a las víctimas.
Según los expertos mexicanos en aviación, debido a que los helicópteros que sirven para la exploración de petróleo y gas suelen volar a baja altura, la capacidad de supervivencia de los mismos es bastante alta.
El vehículo accidentado era un modelo Bell-412, fabricado por la empresa estadounidense Bell Helicopter. Este tipo de helicóptero se considera bastante seguro, con un número muy bajo de accidentes, solo 4 en los últimos 43 años.