Tran Thi Kim Thia ha impartido clases de natación a 3 mil 800 menores de Dong Thap.

Tran Thi Kim Thia, apodada cariñosamente Sau Thia por sus vecinos, es muy diferente de las otras diecinueve figuras inspiradoras destacadas por Forbes Vietnam. No recibió educación formal, ni ejerció ningún cargo de poder: simplemente enseñó a nadar gratis a 3.800 niños.

Los alumnos de Sau Thia tienen mayormente entre siete y quince años. A medida que se acercan las vacaciones de verano, período en el que los casos de ahogo aumentan drásticamente en el delta del Mekong, visita a todas las familias de la comuna de Hung Thanh para convencer a los padres de que dejen que sus hijos participen en sus lecciones de natación. Si los padres o abuelos no tienen tiempo para llevar a los pequeños a la escuela, Sau Thia con gusto lo hace por ellos. Le Thi Ha, de la aldea 2A está muy agradecida con Sau Thia, porque ahora ya no se tiene que preocupar por sus nietos durante la temporada de inundaciones.

“Tengo tres nietos de cuatro a nueve años. No sabían nadar. Como no tuve tiempo de llevarlos a la clase de natación, Sau Thia se ofreció a hacerlo por mí. Hoy estoy completamente tranquila porque los más pequeños saben nadar y, por lo tanto, están fuera de peligro”, dijo.

Generosa, paciente y responsable, Sau Thia sigue de cerca a su alumno hasta que sabe nadar. Tran Minh Tan, uno de sus alumnos, ahora nada como un pez después de sólo una semana de lecciones. Él cuenta: “Mis padres habían intentado enseñarme a nadar, pero fue más difícil que con la señora Sau Thia. Me explicó cómo reproducir exactamente cada gesto y cada técnica. Gracias a ella, ahora ya no le tengo miedo al agua. Muchos de mis vecinos también han aprendido de ella”.

Sau Thia cuida a los alumnos cuando sus familiares están ocupados.

No sólo imparte clases de natación gratuitas, Sau Thia cuida a los alumnos cuando sus seres queridos están ocupados. A pesar de su edad y las limitaciones impuestas por la crisis de salud, Sau Thia continúa sus lecciones en pequeños grupos de diez para limitar el riesgo de contagio. Sau Thia compartió: “Mientras pueda moverme, seguiré enseñando a los niños a nadar. Soy pobre materialmente pero rica de corazón porque mis vecinos me quieren mucho. Para mí, el dinero no vale nada comparado con la vida de los niños. Estoy feliz de hacer algo por ellos”.

Nguyen Thi Hac, vicepresidenta del Departamento de Educación y Propaganda del Comité del Partido Comunista del distrito de Thap Muoi, admira la generosidad de Sau Thia.

“Aunque ya no es muy joven, Sau Thia continúa participando en la protección de los niños. Ella es parte de lo que llamamos ejemplos humildes pero nobles que inspiran a toda la comunidad”, expresa.

En 2018, Sau Thia recibió el premio KOVA en la categoría “Song dep” (Buen comportamiento). En 2020, recibió la Orden del Trabajo, tercera clase del Presidente de la República y un certificado de mérito del Primer Ministro por su contribución a la comunidad.