El pescador Sau Ninh (Foto: bienphong.com.vn)

 Oriundo de Binh Dinh  y procedente de una familia pobre, Sau Ninh tuvo siempre desde temprana edad un único deseo: salir de la pobreza. Decidido a tener éxito, obtuvo un préstamo para financiar la construcción de su primer barco de pesca. Hoy, Sau Ninh gestiona una flota de dieciséis embarcaciones con una potencia de hasta 8.000 caballos de fuerza, de ellos 10 son de su propiedad y el resto pertenece a otros pescadores del pueblo. 

Especializada en pesca en alta mar, su tripulación captura unas 2.000 toneladas de atún cada año, equivalentes a 1,2 millones de dólares. En términos de ganancias, él solo gana 86 mil dólares al año.

Según él, la clave de su éxito depende de la selección y participación de los tripulantes. A Sau Ninh le gusta seleccionar a los capitanes de los barcos y pedirles que participen financieramente en las expediciones en el mar. Si alguno no tiene los fondos necesarios, Sau Ninh ofrece prestarle dinero sin intereses. 

Para aliviar las posibles dificultades financieras de su tripulación, este magnánimo hombre ha creado un fondo permanente de 40 mil dólares. Sau Ninh explicó: “Es lamentable que pescadores con fuerza y competencia encuentren dificultades por problemas financieros. Estoy en capacidad de ayudarlos. Es una ayuda mutuamente beneficiosa”. 

Con el respaldo de Sau Ninh, Nguyen Van Phan, miembro de la tripulación, ahora posee tres barcos de pesca. Compartió su emoción: “Sin Sau Ninh nunca podría haberme convertido en propietario. Él y su esposa me apoyaron mucho. Les estoy eternamente agradecido”.

El esposo de Cao Thi Kim Thien también es parte de la tripulación. Antes de comenzar a trabajar para Sau Ninh hace 20 años, la pareja se encontraba en una situación extremadamente precaria. Sau Ninh los ayudó a renovar su casa y construir un nuevo barco de pesca. Hoy, la pareja posee dos. Cao Thi Kim Thien dijo: “En ese momento no teníamos casi nada. Sau Ninh financió la renovación de nuestra casa y la construcción de nuestro barco. Nos ofreció un hogar y un trabajo”.

Como jefe de pesca experimentado, Sau Ninh comprende los riesgos de las expediciones en alta mar y la importancia de garantizar buenas condiciones de trabajo para los marineros. Por eso está particularmente atento a la seguridad de su tripulación y al perfecto mantenimiento de la flota. Navegando en las aguas de los archipiélagos Truong Sa (Spratly) y Hoang Sa (Paracel), la presencia de sus barcos confirma la soberanía marítima del país. 

Este jefe ejemplar recibió la Orden del Trabajo de tercera clase del Presidente de la República y fue reconocido por el Gobierno como agricultor destacado.