Un representante del Ministerio de Educación y Formación entrega flores para saludar a Nguyen The Quynh en el aeropuerto internacional de Noi Bai

Ningún miembro de la familia de The Quynh ha estudiado nunca física. Su padre murió mientras él estaba en secundaria. Su madre trabajó día a día en un pequeño negocio para ganarse la vida y lograr que él y su hermando mayor pudieran ir a la escuela. Cuando pasó el examen para ingresar en la Escuela de Excelencia Vo Nguyen Giap, fue admitido en ambas facultades matemáticas y físicas. Finalmente optó por estudiar física con el deseo de aplicar los conocimientos científicos a la práctica. Su pasión por esta disciplina fue siempre una motivación para conseguir sus logros académicos. Al llegar al aeropuerto internacional de Noi Bai muy pronto para acoger a su hijo después del concurso, la señora Tran Thi Vi Hanh sin esconder su orgullo ni su felicidad, dijo: “A la hora de criar a mis hijos sola. Es difícil, pero me esfuerzo para superar todos los obstáculos que aparecen. Afortunadamente, ellos son estudiosos e inteligentes. Quynh no tiene mucho tiempo para estudiar en casa, también le encanta leer los cómics de Doraemon. Sólo le animo con palabras, pero es perfectamente consciente de la necesidad de estudiar para tener un futuro mejor”.

Extrovertido y con confianza en sí mismo, Quynh admite a sus amigos que no tiene ningún método especial. Estudió lo que le gusta y supo distrubuir de forma razonable el tiempo dedicado al aprendizaje y al ocio. Porque según él, lo más importante es captar los conocimientos básicos y entender a fondo los temas que se estudian. Quynh compartió: “Normalmente, voy a la clase y hago los deberes que manda el profesor en casa. Estudio a las diez de la noche. Lo importante para mí son las asignaturas que me gustan, de este modo el estudio me resulta más eficaz. Mi madre a menudo me dice que el único camino a seguir es el estudio. Soy consciente de esto y siempre trato de lograr mis objetivos”.

Aparte de la física, a Quynh le gusta ir al cine y charlar con sus amigos. Cada vez que participa en las competiciones provinciales, nacionales e internacionales, hace nuevos amigos que tienen la misma afinidad por la ciencia. Después de ganar por segunda vez el metal dorado en la Olimpiada Internacional de Física 2017, Quynh se ha inscrito en la Universidad de Ciencias Naturales de Hanoi. Al respecto, reveló: “Tengo la intención de ingresar en algunas universidades de Estados Unidos a finales de este año. Por ahora, tengo que pasar el examen de inglés. Me gusta la física de materiales y en el futuro, voy a trabajar en el ámbito de ciencias en física o química”.

Sus 2 medallas de oro son para Quynh solo un logro inicial. En el futuro, dedicará máximos esfuerzos para poder completar su sueño de seguir sus estudios de física en el extranjero.