(VOVworld) – Para los vietnamitas, las fiestas tradicionales del Tet (Año Nuevo Lunar) constituyen una etapa de reunión familiar. Sin embargo, esto no es siempre el caso para los deportistas nacionales de alto nivel, entre ellos, el gimnasta Pham Phuoc Hung, quien por octava vez renunció a disfrutar las festividades con los seres queridos en su tierra natal para lograr el sueño de asistir a los Juegos Olímpicos de Río 2016.

El gimnasta Pham Phuoc Hung en una competición

En el Campeonato Mundial de Gimnasia en 2015, el atleta Pham Phuoc Hung y su compatriota Phan Thi Ha Thanh ganaron el derecho de participar en el Preolímpico de la disciplina que se llevará a cabo en abril venidero en Brasil. A fin de alcanzar buenos resultados, Pham Phuoc Hung tuvo que ir a China a principios de este año para realizar sesiones de entrenamiento y lograr una mejor preparación para importantes competiciones. Phuoc Hung manifestó: “Estoy triste por no haber podido disfrutar el Tet con mi familia y amigos. Pero mi máximo objetivo es competir en los Juegos Olímpicos. Así que no había otra opción para mí. Para lograrlo, me he centrado en este objetivo y espero que voy a tener éxito.”

Cuando estudiaba en la escuela primaria, este joven tuvo que salir de su casa para formarse en el extranjero. Recordó vívidamente los festejos del Tet que pasó lejos de su familia y país, expresando: “Cuando yo tenía 9 o 10 años de edad, algunos de nuestros entrenadores regresaban a Vietnam por su trabajo sin celebrar el Tet con nosotros. Junto con otros deportistas vietnamitas, íbamos a un parque y veíamos los fuegos artificiales. Nunca tuvimos una fiesta como las de Vietnam. Sólo había golosinas para los niños”.

A su vez, Ngo Thi Hong Van, madre de Hung, recordó: “Yo recuerdo que la primera vez que Hung estuvo ausente, tuve que irme para la casa de mis padres durante 6 meses para tratar de olvidar la tristeza por la separación de mi hijo. Lloré durante todo ese tiempo. Al año siguiente, regresó a Vietnam. Él no me reconoció y me dijo que había cambiado mucho. Nos abrazamos y lloramos”.

Descansando después de horas de duro entrenamiento

Durante los 21 años de su carrera, Pham Phuoc Hung ganó muchas medallas regionales y mundiales. Además, la gimnasia le ayuda a formar su personalidad de trabajar sin cesar y sin rendirse ante las dificultades y desafíos. Esas cualidades eran evidentes cuando se le diagnosticó una tuberculosis ósea y deformación de la columna vertebral. Al parecer esta enfermedad le iba a obligar a renunciar al deporte. No obstante, con una voluntad de hierro y cuidados intensivos, Pham Phuoc Hung ha superado su dolor físico. Con su increíble valentía, logró impresionantes resultados cuando representó a Vietnam en la competición olímpica 2012 y ganó la medalla de oro en el Campeonato Mundial de Gimnasia 2013 en Eslovenia.

En el Campeonato Mundial 2015 en Escocia, se dio cuenta de un ejercicio que nunca antes había hecho, haciendo un ángulo recto con los anillos. Su actuación se ha registrado en la lista de mejores gestos técnicos de la gimnasia, reconocida por la Federación Mundial de esta disciplina. Es un gran honor para él. Phuoc Hung dijo al respecto. “No fue una posición gimnástica muy difícil, pero nadie lo había hecho antes. Me atreví a tratar de potenciar mi propia creatividad durante las competiciones. Acepté el riesgo y logré el éxito ya que fue validado por la Federación Mundial de Gimnasia. Estoy muy feliz y espero que los futuras gimnastas vietnamitas pongan más esfuerzos para seguir siendo creativos y conquistar nuevos triunfos en el mundo.”

Si Pham Phuoc Hung se incluye en la lista de los 24 mejores gimnastas clasificados en el Preolímpico 2016, este atleta participará por segunda vez en los Juegos Olímpicos, después de hacerlo en los de Londres 2012.