La gira de Xi Jinping tiene como finalidad fortalecer la confianza y la comprensión mutua entre China y Rusia. Es también una ocasión para que los líderes de ambos países deliberen acerca de la cooperación bilateral y los asuntos internacionales de interés común.
El presidente chino Xi Jinping (i) y el presidente ruso Vladimir Putin en la reunión celebrada el 20 de marzo en el Kremlin. (Foto: Ministerio de Relaciones Exteriores de China) |
La naturaleza especial de las relaciones Rusia-China
En el contexto complejo de la situación mundial, el viaje del líder chino reafirma la naturaleza especial de la asociación bilateral, que se basa en la confianza y el respeto por la soberanía y los intereses de cada uno. Según el presidente ruso, Vladimir Putin, ha pasado una década desde la primera visita de Xi Jinping a su país como Jefe de Estado (en 2013), el mundo ha experimentado muchos altibajos, pero la amistad entre ambos pueblos sigue consolidándose. Los lazos bilaterales han alcanzado un máximo histórico y continúan fortaleciéndose.
En el aspecto personal, se forma una especial amistad y confianza entre los líderes de los dos países. Vladimir Putin y Xi Jinping se han reunido unas 40 veces, de diversas formas, en los últimos años. Estos contactos son "siempre productivos y muy útiles para las relaciones bilaterales", como afirma el asistente del presidente ruso, Yuri Ushakov.
Un factor importante de los nexos entre Moscú y Beijing es la cooperación comercial y económica. Desde 2010, China es el mayor socio comercial de la Federación Rusa. El año pasado, el intercambio comercial bidireccional alcanzó un récord de 185 mil millones de dólares, lo que acercó mucho a Rusia y China al objetivo establecido por los dos gobiernos de lograr los 200 mil millones de dólares para 2024. En los primeros 2 meses de 2023, el comercio bilateral alcanzó los cerca de 33,7 mil millones de dólares, un crecimiento de casi un 26% respecto al mismo período del año pasado.
En cuanto al sector energético, uno de los principales impulsores de la cooperación comercial, este registró un nuevo avance cuando a fines del año pasado Rusia ocupó el segundo lugar en el suministro de petróleo a China y el cuarto en el suministro de gas natural licuado. A través del gasoducto "Poder de Siberia", en 2022, la provisión del gas ruso al gigante asiático aumentó 1,5 veces respecto al 2021 y alcanzó un récord de 15.500 millones de metros cúbicos.
Moscú y Beijing también cooperan en la industria nuclear. Con la participación de Rusia, cuatro unidades de la planta de energía nuclear de Tianwan y un reactor de neutrones rápidos MCER están en construcción en China.
Un alto nivel de confianza ha contribuido al desarrollo de la cooperación militar bilateral. En noviembre del año pasado, por primera vez, un avión militar ruso aterrizó en un aeropuerto chino y una aeronave militar china hizo lo mismo en el territorio de la Federación Rusa. También en 2022, por segunda vez, las dos partes realizaron una patrulla conjunta en el Océano Pacífico.
En particular, los enfoques de Moscú y Beijing sobre los problemas fundamentales del orden mundial y los asuntos internacionales importantes son coincidentes o cercanos. Ambas partes trabajan de forma conjunta y activa en plataformas multilaterales, como Naciones Unidas, el grupo líder mundial de economías desarrolladas y emergentes (G20), el Grupo de las cinco economías emergentes líderes en el mundo (BRICS) y la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS).
En la actualidad, China está promoviendo el papel de mediador en las negociaciones para poner fin al conflicto entre Rusia y Ucrania. El mes pasado, Beijing lanzó un plan de paz que enfatiza el respeto por la soberanía de las naciones y previene el uso de armas nucleares. Moscú ha acogido con satisfacción la propuesta.
En busca de una nueva visión para las relaciones Rusia-China
Según Xi Jinping, la visita a Rusia es un viaje de amistad, cooperación y paz. Este líder aboga por trabajar con el presidente Putin para trazar una nueva visión, un nuevo plan y nuevas medidas para el desarrollo de la asociación estratégica integral bilateral en el futuro próximo.
Su agenda en la nación euroasiática incluirá la firma de más de 10 documentos, entre ellos la Declaración Conjunta sobre la profundización de la asociación integral y la cooperación estratégica que ingresan a una nueva era y otra Declaración Conjunta sobre el plan para desarrollar áreas importantes de colaboración económica entre Moscú y Beijing para 2030.
En un artículo escrito para “Renmin ribao” (Diario del Pueblo) en vísperas de la visita a Rusia de Xi Jinping, con el título: “Rusia y China: una asociación para el futuro”, Vladimir Putin pone grandes expectativas en sus conversaciones con el líder chino y cree que darán un nuevo y fuerte impulso a todos los ámbitos de la cooperación bilateral.
La visita de Estado a la Federación Rusa del presidente chino, Xi Jinping, apenas después de su reelección para un tercer mandato, ha evidenciado la importancia especial de China para Rusia en el mundo moderno. Los resultados de esta gira reforzarán la opinión de que el desarrollo de las relaciones entre Moscú y Beijing es una opción estratégica que ocupa una posición prioritaria en la política exterior general de cada parte.