(VOVworld) – El Tratado Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (TPP) ha sido firmado recientemente por Vietnam y otros 11 países participantes en Nueva Zelanda. Este es el fruto no sólo de los 5 años de la negociación que pone en primera fila los beneficios nacionales, sino también de 3 décadas de la Renovación vietnamita, considerando la integración económica mundial como una tarea trascendental en las resoluciones del Partido Comunista de esta nación asiática.

El Tratado Estratégico Transpacífico de Asociación Económica (TPP) ocupa el 40% del Producto Interno Bruto global y el 30% del volumen comercial mundial. Se trata de un acuerdo de libre comercio de nueva generación, considerado como modelo de desarrollo comercial de la región y del resto del mundo con requisitos más exigentes en medio del desarrollo acelerado de las fuerzas productivas y la profunda integración internacional.

TPP, pensamiento perspicaz y visión de la era

El primer ministro de Vietnam, Nguyen Tan Dung

Al destacar la importancia del TPP que facilita el desplazamiento de bienes y servicios, capitales y tecnologías, así como garantiza un entorno más equitativo de negocios, el primer ministro de Vietnam, Nguyen Tan Dung afirmó que este acuerdo permitirá la creación de cadenas de valor en el mercado de los 12 países integrantes, y la mejoría en el crecimiento económico, al igual que el incremento de la oferta laboral y el salario, lo cual elevará el nivel de vida de la población. En especial, el tratado equilibra los beneficios entre las economías sin importar su nivel de desarrollo, respeta la institución política de cada país miembro y exige el cumplimiento de sus respectivas legislaciones nacionales conforme a sus compromisos internacionales.

De esta manera, Nguyen Tan Dung apreció la participación nacional en los acuerdos de nueva generación, entre ellos el TPP, pese al nivel modesto de desarrollo económico del país, lo cual evidencia la naturaleza política del Partido y el Estado de Vietnam, además de reafirmar la confianza en la capacidad del Pueblo vietnamita.

Oportunidades paralelas a desafíos

Sobre sus ventajas, Nguyen Tan Dung reiteró que los tratados de libre comercio de nueva generación estimularán el desarrollo socioeconómico, especialmente la atracción inversionista y el impulso de las exportaciones a los mayores mercados del mundo, tales como la Unión Europea con un Producto Interno Bruto superior a 18 billones de dólares mientras que esta cifra de los 12 países integrantes del TPP sobrepasa los 20 billones de dólares. Estas zonas cuentan con tecnologías originales y son los mayores mercados de exportación e inversión de Vietnam durante los últimos años. En idéntico sentido, el aumento del intercambio de bienes y servicios con dichos mercados contribuirá a equilibrar las relaciones entre los estados involucrados. Cabe destacar que la participación vietnamita en el acuerdo es un paso innovador en el cumplimiento de la política exterior de Hanoi, especialmente en la región donde la competencia estratégica es cada vez más reñida.

Agricultura es uno de los sectores más afectados por la competencia reñida después de la entrada en vigor del TPP

En cuanto a las dificultades, el primer ministro vietnamita destacó la competencia crítica entre las partes implicadas en materia de productos, empresas y naciones sin contar la calidad de instituciones y entorno de negocios. Advirtió también de las presiones de la competencia que provoquen la quiebra de las compañías no calificadas, incrementando la tasa de desempleo, sobre todo en el sector agrícola y agravando la brecha entre los ricos y pobres.

Entretanto, son enormes los retos en el cumplimiento de los compromisos internacionales, desde el perfeccionamiento jurídico hasta la capacitación de recursos humanos.

Acción de Vietnam

Para aprovechar las oportunidades y superar las dificultades, Nguyen Tan Dung hizo hincapié en el mejoramiento de la competitividad de la economía nacional, considerando el empresariado como factor decisivo, además de renovar el pensamiento para lograr más cuotas de mercado extranjero.

Según el jefe del Gobierno vietnamita, para promulgar mecanismos más rigurosos, el Estado necesitará desempañar su función creadora para el desarrollo, especialmente en la estabilización macroeconómica, el diseño de leyes y políticas y la planificación administrativa para garantizar un ambiente comercial más transparente que respeta la libertad económica y la equidad en la competencia.

Consciente de dichos requisitos, Vietnam debe acelerar el perfeccionamiento institucional con el espíritu de renovación integral, tanto económica como política sobre la base de la supremacía constitucional. Entretanto, hay que construir un contingente de funcionarios más calificados, acelerar la reestructuración de las empresas públicas e incentivar el desarrollo del sector privado para contribuir a elevar la competitividad y la autonomía de la economía nacional, afirmó Nguyen Tan Dung.