El informe acusa a Vietnam de haber reducido intencionalmente el número de víctimas en comparación con 2018 y apunta que las autoridades no continuaron tratando los casos suspendidos debido a la falta de instrucciones jurídicas para la ejecución cumpliendo con el Código Penal. Califica de “ineficientes” los esfuerzos del Gobierno vietnamita en la lucha contra dicho crimen de lesa humanidad por carecer de coordinación intersectorial y asegura que hay funcionarios comunales involucrados en el tráfico humano.
Acusaciones subjetivas y tergiversadoras
Fuerzas guardafronteras detienen a una persona involucrada en el tráfico humano (Foto de ilustración) |
Según informó la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, en varios territorios de África, Oriente Medio y Asia se registró una cifra creciente de víctimas de la trata de personas, además de la ola migratoria de América Central hacia Estados Unidos a través de la frontera con México. En este sentido, la mayoría de los países del mundo, incluido Estados Unidos enfrentan retos derivados de dicha lacra. En la reunión de altos funcionarios de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), celebrada del 24 al 27 de septiembre de 2018, y en la duodécima conferencia ministerial del bloque regional, llevada a cabo del 20 de octubre al 2 de noviembre del mismo año sobre la prevención y lucha contra el crimen transnacional, se estimó que el tráfico humano seguirá crítico, por lo cual todos los países del planeta deben mantener los esfuerzos para erradicarlo.
El reporte estadounidense informa que en 2018 en Vietnam hubo 350 casos con más de 400 infractores detenidos, frente a 234 y 308 en 2016, respectivamente. Pero según las estadísticas vietnamitas los casos fueron 211 y los detenidos 276, una reducción del 44% y el 43% respecto a 2017. Además, el año pasado las autoridades de Vietnam salvaron y trataron cerca de mil 500 casos, de ellos, 490 fueron víctimas del tráfico humano y los demás, migrantes ilegales. A todas las víctimas se les ofrecieron apoyo económico y consultas médicas y judiciales.
En los primeros 6 meses de 2019, las fuerzas del orden del país indochino detectaron 89 casos y detuvieron a 142 responsables del tráfico de 169 víctimas, una disminución frente al mismo período del año anterior. Esto evidencia la falta de objetividad del Informe anual sobre Trata de Personas 2018 publicado por el Departamento de Estado de Estados Unidos.
Esfuerzos incesantes de Vietnam en la lucha contra el tráfico humano
Actividad en respuesta al Día Nacional contra la Trata de Personas en una escuela en la provincia sureña de Ca Mau (Foto: camautv.vn) |
El enfrentamiento al comercio ilegal de personas es una tarea prioritaria del Partido Comunista y el Estado de Vietnam, con apoyo de toda la población. En 2016, la nación asiática decretó el 30 de julio Día Nacional contra la Trata de Personas, aprobó un programa para este fin en el período 2016-2020 e impulsó el perfeccionamiento de las leyes relacionadas cumpliendo con los requisitos de la actual coyuntura.
Por otro lado, Vietnam sigue cumpliendo los compromisos internacionales frente al tráfico de seres humanos. El 8 de junio de 2012 participó en la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional. Con anterioridad, a finales de 2011, se incorporó al Protocolo de las Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, Especialmente Mujeres y Niños, además del Convenio sobre el Trabajo Forzoso, 1930 (número 29). En idéntico sentido, ratificó la Convención de la Asean contra la Trata de Personas, Especialmente Mujeres y Niños (Actip). Gracias al apoyo de la Agencia japonesa de Cooperación Internacional (JICA), Vietnam logró establecer una línea roja sobre los casos del tráfico humano, reforzando así la red nacional contra este mal.
Cabe destacar que el comercio ilegal de personas continúa siendo crítico en todo el mundo. Pese a las dificultades, Vietnam persiste en enaltecer las experiencias en la materia, movilizando la participación del sistema político en la prevención y lucha contra ese crimen de lesa humanidad. Los esfuerzos del país indochino son innegables, lo que refuta las evaluaciones subjetivas y tergiversadoras del Departamento de Estado de Estados Unidos.