 Vietnam fue elegido el 7 de junio de 2019 como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU para el mandato 2020-2021, con 192 de los 193 votos a favor. (Foto: VNA) |
Si en el pasado Vietnam impresionó a los amigos internacionales por su profunda aspiración de paz, hoy, su transformación fuerte y dinámica se plasma en un innegable desarrollo económico. Vietnam es un hito resplandeciente en el mapa de crecimiento regional. Ousmane Dione, ex director del Banco Mundial en Vietnam, subrayó: “La tasa de en Vietnam en Vietnam se ha reducido a menos del 10%, mientras que el porcentaje de personas en situación de pobreza extrema, es inferior al 3%. Estos niveles son inferiores a los estándares medios mundiales. Estas cifras reflejan el éxito de esta nación en la lucha contra la pobreza y su eliminación”.
De ser un país pobre, con un sistema obsoleto de infraestructuras técnicas y socioenocómicas, Vietnam se ha convertido en una nación en desarrollo y de ingresos medios. Thomas Rath, director del Fondo Internacional de Desarrollo Rural, comentó: “Vietnam ha dado un impresionante salto en su transformación económica. Ya no es solo un país de gran producción agrícola, también obtiene valores muy altos en este sector de la economía. Creo que conseguirá más logros y será un modelo de desarrollo rural y de crecimiento económico en general.”
La renovación y la profunda y progresiva integración internacional han convertido a Vietnam en un actor orgánico de la región y del mundo. Es un socio importante de muchos países, incluidas las grandes potencias. El embajador indio en Hanói, Pranay Verma, dijo: “Vietnam es un socio cercano de la India en cooperación en materia de política, economía y de seguridad en distintas áreas. Es también un eslabón clave en el compromiso de nuestro Gobierno con la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático. Vietnam desempeña un papel indispensable en la visión Indo-Pacífico, en base a los valores e intereses compartidos de promoción de la paz, la estabilidad y la prosperidad en la región.”
Tras su anterior relación de enemistad, ahora Estados Unidos considera a Vietnam como un importante socio en el Sudeste Asiático. Las dos partes no solo encontraron una voz común en la cooperación bilateral, sino que también comparten puntos de vista en asuntos multilaterales. El embajador estadounidense en Hanói, Daniel Kritenbrink, señaló: “No hay límite para la cooperación entre Vietnam y Estados Unidos. Soy muy optimista sobre el futuro económico de Vietnam. La razón es que he visto un Vietnam fuerte, próspero e independiente como líder en la región. Creemos que Vietnam es un gran socio y continuaremos haciendo contribuciones importantes a la región y al mundo”.
De un país sin nombre en el mapa mundial, Vietnam ha ganado la confianza de amigos internacionales. Ha sido elegido dos veces como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Ha participado en debates y propuestas de resoluciones relativas a la paz y la seguridad internacionales.