(VOVworld) – La Unión Europea reforzará su solidaridad interna y definirá orientaciones para su futuro sin el Reino Unido en la conferencia cumbre que se celebrará este viernes en Bratislava, capital de Eslovaquia. Se han preparado para este encuentro diversos guiones destinados a una integración más amplia y profunda del bloque. Sin embargo, parece ser una tarea nada fácil conseguir el consenso entre sus países miembros al respecto.

La Cumbre de Bratislava se efectuará en medio de muchos problemas complicados que debe enfrentar la Unión, entre otros el abandono de Londres, la crisis migratoria, el plan de cooperación militar y el desarrollo económico entre sus integrantes.

Temas centrales

La solución de la crisis migratoria será quizás la prioridad de todos los miembros de la Unión en esta cita. En vísperas del evento, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk mencionó el caso del Reino Unido destacando que los dirigentes del grupo no pueden quedarse con los brazos cruzados ante las lecciones de la inminente salida de ese país (conocida como el Brexit). Asimismo, estimó que es un imperativo hallar en esta conferencia una solución para impedir la afluencia de migrantes, si se desea ver “una Europa tranquila”. En su carta de invitación enviada a los estados integrantes, Tusk recalcó que la Unión ha actuado con demasiada lentitud para tratar este problema y ahora ya no queda mucho tiempo. Según este líder, la próxima cumbre deberá dar un viraje en la materia.

La conferencia extraoficial de cancilleres de la Unión Europea en Bratislava, el pasado 4 de septiembre. (Foto: Xinhua/VNA)

Otro tema importante radica en el reforzamiento de la seguridad frente a las amenazas terroristas, y la consolidación de las fronteras internas. Cuatro días antes de la celebración de la conferencia, Alemania y Francia anunciaron un plan conjunto relativo a la construcción de una sede militar para las misiones de la Unión Europea y las reuniones periódicas sobre la política de seguridad y defensa del bloque. El proyecto subrayó la necesidad de promover la solidaridad y aumentar la capacidad defensiva de la alianza europea, a fin de proteger mejor sus fronteras y pueblos.

De la misma manera, en el Mensaje de la Unión, emitido este miércoles, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker dijo que los 14 atentados perpetrados por elementos terroristas en el suelo europeo en lo que va del año exigen la aprobación de medidas más eficientes contra este mal. Mencionó entre otras, la fundación de un centro neurálgico encargado de las fuerzas militares aliadas y la creación de un fondo de defensa del bloque.

La crisis migratoria es un asunto peliagudo para los líderes del bloque europeo (Foto: Reuters/VNA)

Con antelación, el primer ministro de la República Checa, Bohuslav Sobotka, informó que en la Cumbre de Bratislava, su país propondrá tres prioridades. Se refirió primeramente al tema de seguridad, en concreto la protección de las fronteras externas, la lucha antiterrorista y la colaboración para crear el ejército europeo. Segundo, llamó a aprovechar todas las oportunidades que le brinda al bloque un mercado de libre comercio y apoyar la circulación libre dentro de la Unión, en aras de igualar el nivel de vida entre sus países miembros. Y por último pidió elevar el papel del Consejo Europeo.

Desacuerdos pendientes

En realidad, a pesar de la importancia de la próxima cumbre, no se han notado muchas opiniones optimistas sobre sus resultados. Autoridades del grupo muestran hasta el momento una actitud bastante reservada al referirse a las perspectivas de la cita. Un funcionario declaró que los dirigentes europeos procurarán mantener la solidaridad y afirmar en esa cumbre que con 27 miembros, el bloque seguirá adelante. Esto ya podrá considerarse un éxito del encuentro, dijo. Mientras, ante el umbral del evento, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker reconoció que en este bloque falta una debida integración, ya que la cooperación entre sus estados miembros todavía no alcanza el nivel deseado. Una prueba de esto es que antes de la apertura de la cumbre, el canciller de Luxemburgo, Jean Asselborn solicitó expulsar temporalmente a Hungría, argumentando que este país violó los valores democráticos esenciales de la Unión Europea y maltrató a los migrantes.

Por otra parte, existen diferencias en cuanto a la forma de enfrentar las presiones de la globalización. Algunas naciones expresaron el interés de aumentar medidas de protección comercial, mientras otras pusieron énfasis en la elevación de la competitividad de la economía. En tanto, según observadores, no ponen muchas expectativas en la solución de los problemas pendientes en relación con la proyectada Asociación Transatlántica de Comercio e Inversión con Estados Unidos, y las negociaciones sobre el Tratado de Cooperación Económica y Comercial Integral con Canadá.

La Cumbre de la Unión Europea en Bratislava resulta ser muy importante para el porvenir de los 27. Pero, ¿los miembros de esta alianza podrán potenciar la unidad interna y alcanzar un consenso sobre su camino en el futuro? La respuesta dependerá de las propuestas concretas de cada uno en esa cita.