Los delegados dedicaron un minuto de silencio para recordar a las víctimas mortales por la pandemia del covid-19 en la reunión del 12 de marzo de 2020. (Foto: ONU) |
Un informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) publicado el 3 de diciembre, estimó que la enfermedad respiratoria causada por el nuevo coronavirus podría llevar a 32 millones de personas en los 47 países menos desarrollados del mundo a una situación de extrema pobreza. En particular, señaló que los objetivos de desarrollo global no se lograrán sin una acción conjunta.
Esfuerzos globales en respuesta al covid-19
En la sesión de apertura, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, dijo que hasta ahora la pandemia se ha cobrado la vida de más de un millón y medio de personas en todo el mundo y ha exacerbado otros desafíos a largo plazo, incluidos la desigualdad y el cambio climático.
Según Guterres, el mundo seguirá enfrentando los impactos de la epidemia en las próximas décadas, aunque se utilicen las vacunas preventivas. Apreció los esfuerzos en la investigación científica para desarrollar vacunas capaces de contrarrestar el virus SARS-CoV-2, pero también destacó que estas no son un “remedio mágico” para hacer frente a la complicada situación actual. El jefe de la ONU reiteró que la vacuna anticovid-19 debería ser considerada “un producto global” al que todos los ciudadanos puedan acceder, al tiempo que pidió a los países contribuir para compensar el déficit valorado en 4 mil 300 millones de dólares para los trabajos anticoronavirus en los próximos dos meses.
En representación de Vietnam como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU para el mandato 2020-2021 y presidente rotativo de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) este año, el primer ministro Nguyen Xuan Phuc envió un mensaje importante a la referida reunión.
El jefe del Gobierno vietnamita resaltó el papel central de las Naciones Unidas, y pidió fortalecer la solidaridad y promover la cooperación internacional, así como los esfuerzos de los mecanismos multilaterales en la gobernanza global para afrontar el nuevo coronavirus. Destacó, además, la necesidad de poner a la población en el centro de las políticas y los planes de acción, dando prioridad a la protección de la salud y la vida humana y asegurando el acceso de todos los países a la vacuna y los medicamentos asequibles para el tratamiento de este mal.
En el año de presidencia de la Asean en 2020, Vietnam, junto con otros miembros del bloque regional, propuso numerosas iniciativas en respuesta al covid-19, como la creación del Fondo de la Asean para este fin, la Reserva de materiales sanitarios y el Centro para Emergencias de Salud Pública y Enfermedades, entre otras, acotó.
Necesidad y tendencia en la cooperación antiepidémica
Pocos días antes de la reunión especial de la Asamblea General de la ONU, la Asean y la Unión Europea (UE) convocaron la 23a Conferencia Ministerial bilateral, que se llevó a cabo el 30 de noviembre de manera virtual, para debatir las relaciones futuras y los problemas internacionales, especialmente cómo lidiar con el covid-19 e impulsar la recuperación económica.
En esta cita, ambas partes coincidieron en la importancia de la cooperación dentro de la Organización Mundial de la Salud (OMS), incluida la forma de dar evaluaciones objetivas de cómo responder a la pandemia. Además, expresaron el deseo de continuar fortaleciendo la colaboración internacional para hacer frente a este desafío y recuperar la economía de manera sostenible, en línea con el Marco de Recuperación Integral de la Asean.
La reunión también exhortó a una mayor disponibilidad y resiliencia para responder a la actual crisis sanitaria global, en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, especialmente los relativos a la salud y la felicidad.
Ante los graves impactos derivados del nuevo coronavirus, la cooperación internacional es el requisito y la tendencia inevitable para afrontarlo. Como miembro responsable de las Naciones Unidas, Vietnam espera que la comunidad internacional ponga en juego la voluntad y la fuerza, así como el espíritu de solidaridad y cooperación, para superar juntos este desafío. Al mismo tiempo, el país muestra su disposición a tomar parte en este proceso con el fin de construir un futuro mejor para todos.