 El debate abierto de alto nivel del Consejo de Seguridad sobre la seguridad marítima, en el puente de Hanói. (Foto: VNA) |
Durante el mencionado debate, el primer ministro vietnamita, Pham Minh Chinh, hizo tres sugerencias. Primero, insistió en la necesidad de mejorar la conciencia global sobre el papel de los océanos y los mares, así como de las amenazas a la seguridad marítima. En segundo lugar, llamó a la adopción de medidas basadas en los mecanismos e iniciativas regionales en esta materia bajo la coordinación de la Organización de las Naciones Unidas para intensificar el intercambio de información y experiencias, la implementación de acciones conjuntas y la respuesta oportuna para hacer frente a los desafíos universales. Por último, llamó a acatar las políticas, leyes y reglas de conducta en los asuntos marítimos de acuerdo con el derecho internacional, especialmente la Carta de la ONU y la Convención de esta entidad del Derecho del Mar (Unclos) de 1982.
Imperio de la normativa mundial, sobre todo la Unclos de 1982
El profesor británico James Rogers, cofundador y director del Consejo de Investigación de Geoestrategia del Reino Unido, valoró que las tres propuestas del premier vietnamita revisten un significado especial tanto para la región como para el resto del mundo. Aplaudió específicamente la idea de establecer una red de mecanismos e iniciativas de seguridad marítima en el Mar del Este, señalando que esta sugerencia debe ser apoyada en el marco de la ONU y también en el sudeste asiático, especialmente en cuanto al Código de Conducta en el Mar del Este (COC). Según el experto, es menester crear un mecanismo de coordinación en pos de alentar a las naciones a promover los importantes derechos marítimos de la Unclos.
Mientras tanto, la página web especializada en asuntos exteriores “The Diplomatic Society” de Sudáfrica publicó el 16 de agosto un artículo de su redactor en jefe Kirtan Bhana, apreciando el enfoque de Vietnam sobre la seguridad marítima. El autor destacó a la Unclos como un marco legal con integridad y universalidad que rige todas las actividades en las aguas, así como una base de cooperación internacional para abordar los desafíos globales comunes.
Entretanto, la prensa checa presentó una serie de artículos en los que reconoce el desempeño de Hanói en la garantía de la seguridad marítima, así como su postura en la solución de las cuestiones en el Mar del Este mediante medios pacíficos, en virtud del derecho internacional y la Unclos.
Además, se publicó el 12 de agosto en el sitio web halonoviny.cz un artículo en el que puntualiza que como un estado costero, Vietnam se ha empeñado en participar y contribuir a la protección y la mejora del entorno de seguridad en las aguas.
La plataforma electrónica parlamentnilisty.cz también exalta la política de Vietnam de solucionar pacíficamente las disputas en la zona del Mar del Este de acuerdo con la ley mundial, y de oponerse a las violaciones unilaterales del derecho internacional en el área, así como de reafirmar el valor de la Unclos y el fallo de la Corte Permanente de Arbitraje de 2016. En el artículo también se remarca que ante la complejización de la situación marítima en el mundo, incluyendo en el Mar del Este, la posición del país indochino recibe el apoyo de la comunidad internacional, incluida la Unión Europea.
El periódico en línea de Rusia, Infox.ru, sacó al público el 12 de agosto un artículo titulado “Ideas Asia-Europa” del presidente del Consejo de expertos del Fondo de asistencia, Grigory Trofimchuk, quien evaluó que Vietnam no sólo recordó nuevamente al mundo las amenazas de las disputas territoriales y la responsabilidad común ante sus posibles consecuencias, sino también señaló al público internacional los argumentos concretos para fortalecer los esfuerzos globales al respecto. Manifestó su convicción de que las propuestas de Hanói darán paso al establecimiento de la paz duradera en el Mar del Este.
 El primer ministro Pham Minh Chinh en el debate del Consejo de Seguridad, el 9 de agosto. (Foto: VNA) |
Seguridad en el mar: Cuestión mundial
Se trata del primer debate sobre la seguridad marítima de alto rango, lo que demuestra el creciente interés internacional en tal cuestión, particularmente en la región del Mar del Este. Esta preocupación creciente tiene sus fundamentos en que, pese a que los puntos críticos de conflicto y las amenazas de seguridad tradicionales y no tradicionales tienden a aumentar en los mares y océanos, los países todavía no han encontrado soluciones efectivas.