Francia, como país anfitrión, acogerá en la conferencia a unos 70 jefes de Estado, líderes empresariales y activistas ambientales, con el objetivo de lograr un acuerdo global que movilice recursos para proteger y usar sosteniblemente los océanos, apoyando el cumplimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 14 (ODS 14), centrado en la vida submarina.
 La Conferencia sobre los Océanos en Lisboa, Portugal, 1 de julio de 2022. (Foto: REUTERS/Rodrigo Antunes) |
Cooperación internacional, clave para conservar los océanos
Se estima que para 2030 el valor económico de los océanos superará los 3 billones de dólares, situándose como la quinta economía más grande del mundo. Por ello, protegerlos es vital no solo para conservar los ecosistemas marinos, sino también para garantizar el sustento de millones de personas que dependen directamente de sus recursos.
Consciente de esta realidad, la comunidad internacional ha intensificado sus esfuerzos en los últimos años. En 2022 se adoptó el Marco Mundial de la Diversidad Biológica de Kunming-Montreal, que fija como meta restaurar y conservar al menos un 30 % de las áreas terrestres y marinas para 2030. Un año después, en 2023, se firmó el Tratado de Alta Mar, un hito clave para la protección de los ecosistemas marinos.
Minna Epps, jefa del programa oceánico de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), afirmó: “El Tratado de Alta Mar cubre el 64 % de los océanos del planeta, fuera de las zonas económicas exclusivas de hasta 200 millas náuticas de cada país. Sin embargo, estos espacios enfrentan crecientes amenazas por contaminación del plástico, sobrepesca y cambio climático, las cuales alteran los ecosistemas marinos y ponen en riesgo los medios de vida. Ante este panorama resulta urgente impulsar acciones concretas y reconocer el papel vital de los océanos en la mitigación y adaptación al cambio climático”.
Pese a los compromisos internacionales, la acción ha sido lenta aún. Según los últimos estudios sólo un 2,7 % de los océanos está protegido, lejos de la meta del 30 % para 2030 fijada en el Marco de Kunming-Montreal. Además, el Tratado de Alta Mar aún no cuenta con las 60 ratificaciones necesarias para entrar en vigor. Eso demuestra que la cooperación internacional sigue siendo insuficiente.
Grandes expectativas ante la UNOC 3
En este contexto, la UNOC 3 en Niza genera grandes expectativas como un posible punto de inflexión para impulsar acciones concretas y movilizar a todos los actores en favor de la conservación y el uso sostenible de los océanos.
En vísperas del evento seis países miembros de la Unión Europea anunciaron la ratificación del Tratado sobre Alta Mar, elevando a 28 el número total de Estados que han adoptado el acuerdo. Como país anfitrión, Francia fijó como objetivo alcanzar durante la cumbre las 60 ratificaciones necesarias para que el tratado entre oficialmente en vigor. Olivier Poivre d’Arvor, enviado especial de Francia para los océanos, señaló: “Esperamos que la conferencia logre resultados concretos y coherentes. He participado en varias cumbres sobre océanos en las que se anunciaron compromisos por miles de millones de dólares supuestamente destinados a salvar los mares, pero la realidad es que los océanos continúan en peligro. Por eso, necesitamos actuar y alcanzar un verdadero acuerdo global para protegerlos”.
En paralelo, el Foro de Economía Verde y Finanzas organizado por Mónaco busca involucrar a jefes de Estado y Gobierno, empresas, entidades financieras y la sociedad civil para impulsar inversiones en una economía verde y un transporte marítimo sostenible.
Además, propone instrumentos financieros innovadores que faciliten soluciones sostenibles. Olivier Wenden, vicepresidente y director ejecutivo de la Fundación Príncipe Alberto II de Mónaco, subrayó: “No queremos que este foro sea una reunión o conferencia convencional, sino un espacio de encuentro directo entre empresas y partes relacionadas para impulsar una transformación hacia una economía verde y sostenible. Deseamos identificar soluciones conjuntas, fomentar la innovación que genere empleo y medios de vida, proteger los ecosistemas marinos y movilizar recursos financieros para preservar la salud de los océanos”.
Costa Rica, coanfitrión de la UNOC 3 junto con Francia, espera que el evento permita movilizar compromisos públicos y privados por 100 mil millones de dólares, con plazos definidos, presupuestos claros y mecanismos de supervisión rigurosos.
Con la esperada adopción de la Declaración de Niza, la Cumbre aspira a establecer un marco sólido para canalizar recursos hacia la conservación marina y promover acciones globales concretas que aseguren la protección sostenible de los océanos.