El cultivo rotativo de arroz-camarón es un modelo eficiente para adaptarse al cambio climático.

Desde la emisión de referida orientación ejecutiva, el delta del Mekong cuenta, por primera vez, con un plan integrado para el período 2021-2030 en el que se reitera la importancia de vivir en armonía con la naturaleza para promover el desarrollo. A través del referido documento también se estableció el Consejo de Coordinación Regional para cumplir esa meta.

Sobre tal base, empresas nacionales, inversores extranjeros y socios internacionales han invertido en la puesta en marcha de muchos proyectos en los campos de la agricultura, el transporte, las energías renovables y la logística, los cuales han mejorado la fisonomía y productividad de la región.

Con una actitud orientada al diseño y la creación, el Gobierno ha dirigido este proceso de innovación a través de la mejora de las instituciones, mecanismos y políticas, y ha incrementado la inversión en infraestructura para atraer una mayor participación de inversores nacionales y extranjeros. También ha promovido la transformación a gran escala y ha impulsado el potencial y las fortalezas de la región y las subregiones. Asimismo, el Ejecutivo ha fortalecido la interconexión de la infraestructura económica dentro del delta del río Mekong, y entre esta zona con Ciudad Ho Chi Minh y el este de la región sureña.

Según el investigador independiente Nguyen Huu Thien, la Resolución número 120 es una solución para la estrategia de desarrollo a largo plazo del delta del río Mekong. “La resolución incluye planes para adaptarse a situaciones extremas, incluida una atención especial a la demanda de agua potable en las zonas costeras. La clave para el desarrollo sostenible del delta del río de Mekong es transformar la pura producción agrícola orientada a la cantidad en una que se enfoque en la calidad”, dijo Huu Thien

Por su parte, Nguyen Thanh Binh, presidente del Comité Popular de la provincia de An Giang, dijo que la seguridad hídrica plantea muchos desafíos para el desarrollo económico de las localidades de la zona. Él agregó: “Ante los impactos del cambio climático, la falta de recursos de agua dulce será un gran desafío para el delta del río Mekong. Por eso, propongo construir grandes reservas de agua dulce en dos lugares, uno en An Giang y el otro en Dong Thap. Estas obras almacenarán agua dulce para su uso en la temporada de sequía. Además, con el agua de estos embalses se regarán los cultivos de estas dos provincias y al mismo tiempo se regularán los recursos hídricos de las otras provincias en el curso bajo”.

Los estanques de agua dulce facilitan el riego en el delta del río Mekong.

En el borrador de la Planificación del Delta del río Mekong para el período 2021-2030, con una visión puesta en 2050, presentado por el Ministerio de Planificación e Inversión en Can Tho el pasado mes de noviembre de 2020, el desarrollo sostenible de la región se basa en tres pilares: la economía, la sociedad y el medio ambiente. En el proyecto, se destaca que el factor “humano” es la piedra angular del plan y que la adaptación al cambio climático es la única manera para avanzar. Al mismo tiempo, busca promover la innovación y la creatividad para convertir los desafíos en oportunidades, considerando el cambio climático y la elevación del nivel del mar como incidentes inevitables que solo pueden ser ajustados y controlados.

El Ministro de Planificación e Inversión Nguyen Chi Dung expresó: “Contamos con la base para convertir el delta del río Mekong en un centro de economía agrícola sostenible, dinámico y altamente eficiente del país, de la región y del mundo. El delta del Mekong cuenta con un sistema de infraestructura sincrónico, moderno, multipropósito y multifuncional. También tiene unas rutas de transporte terrestre y fluvial claves, así como centros de suministro agrícola e importantes corredores económicos”.