El primer ministro Pham Minh Chinh (c) en la reunión en línea con la comunidad empresarial y las localidades, el 8 de agosto de 2021 (Foto: VGP)

Hasta julio de 2021, Vietnam contabilizaba alrededor de 840.000 empresas activas. La cuarta ola del covid-19, y la subsecuente aparición de la variante Delta, ha generado muchas dificultades para estas compañías nacionales. 

Entre los principales retos se encuentran la drástica caída de la demanda total, y la consecuente reducción en los pedidos, contratos y de la producción; la disminución de los ingresos y el déficit en el flujo de caja; la interrupción de las cadenas de producción, consumo y exportación; la dificultad en la circulación de mercancías por las diferentes medidas de prevención y control de la epidemia de cada localidad; y la escasez de la mano de obra por el prolongamiento el distanciamiento social.

Una intervención rápida y proactiva 

En este sentido, el Gobierno ha adoptado de modo oportuno numerosas políticas y medidas, tales como la exención y reducción de impuestos, el apoyo a las tasas de interés,  y la rebaja de las tarifas de electricidad, agua, y telecomunicaciones.

Además, ha promulgado de manera proactiva el Decreto 52 que extiende el plazo para el pago del impuesto al valor agregado, así como los impuestos sobre la renta de las empresas, personas físicas y la tierra en 2021. Ha adoptado la Resolución 84 sobre tareas y soluciones destinadas a eliminar las trabas para la producción y los negocios con el fin de promover el desembolso de capital de inversión pública y garantizar el orden social en el contexto de la pandemia; y las sendas resoluciones 42 y 68 sobre medidas de asistencia a los ciudadanos, los trabajadores y los empleadores que enfrentan dificultades por el covid-19.

El gobierno está y hará todo lo posible cuando sea posible

Al hablar en la reunión en línea con la comunidad empresarial y las localidades para debatir las medidas destinadas a superar los desafíos y promover las actividades comerciales y de producción en el contexto de la pandemia del covid-19, efectuada el pasado 8 de agosto, el primer ministro, Pham Minh Chinh, afirmó: “El Gobierno está haciendo todo lo que puede. Sobre el espíritu de ‘beneficios armoniosos, riesgos compartidos’, se establecerá un grupo de trabajo especial para superar las dificultades existentes en apoyo a las empresas, y fortalecer la descentralización y la personalización de las responsabilidades. El Ministerio de Planificación e Inversión seguirá de cerca la situación para asesorar al Ejecutivo para que encuentren soluciones oportunas. El Ministerio de Salud acelerará la vacunación masiva y ajustará los procesos de prevención y control de la epidemia para que las empresas puedan aplicarlos en la producción y los negocios, según las condiciones reales. El Ministerio de Finanzas implementará de manera urgente la  exención y reducción de impuestos, promueverá el crecimiento del mercado de valores, y activará todos los recursos no estatales”.

El jefe del Gobierno también se comprometió a garantizar el transporte fluido de mercancías, estabilizar las cadenas de suministro y facilitar el desarrollo económico. Refiriéndose a este tema,  el ministro de Transporte, Nguyen Van The, dijo: “Actualmente, no hay ningún obstáculo para la circulación de mercancías, especialmente las esenciales para la vida de las personas y las de la exportación. Hemos emitido códigos QR para asegurar su fluida circulación, evitando que sean bloqueadas en los puntos de control del covid-19”.

El Gobierno y las autoridades locales trabajan codo con codo y apoyan a la comunidad empresarial. También agradecen las contribuciones de las compañías al país en momentos difíciles como el actual. Se espera que, con la ayuda del Ejecutivo, las empresas vietnamitas no sólo superen la pandemia sino también que crezcan más, aportando así al desarrollo nacional.