El panorama de la economía vietnamita en los últimos 7 meses muestra señales alentadoras. En este sentido cabe destacar los esfuerzos del Gobierno para perfeccionar las instituciones, eliminando las dificultades para impulsar el crecimiento económico. En julio último la administración continuó fortaleciendo la promulgación de documentos que instruyen el cumplimiento de las leyes enmendadas de Tierras, de Viviendas, de Negocios Inmobiliarios y de Organizaciones Crediticias.

El panorama económico de Vietnam en los últimos siete meses cuenta con muchos puntos positivos. (Foto de ilustración: baodautu.vn)

Muchos indicadores positivos

La economía nacional en los últimos 7 meses registró avances y crecimientos positivos intermensual e interanual. Concretamente, progresaron la agricultura, los servicios y la industria. En especial, el Índice de Producción Industrial aumentó en 60 de las 63 provincias y ciudades del país a un ritmo del 8,5 % en comparación con similar lapso del año pasado, lo que demuestra una recuperación económica a gran escala. 

Otros puntos destacados residen en la estabilidad macroeconómica, la inflación controlada y el equilibrio de la economía garantizados, mientras el Índice de Precios al Consumidor (IPC) medio de los últimos siete meses aumentó un 4,12 %, un alza del 0,04 % respecto al mes de junio. Entretanto, las exportaciones continuaron incrementándose, para un superávit comercial de más de 14 mil millones de dólares, lo que contribuyó a asegurar la balanza de pagos, y la atracción de inversión extranjera directa (IED) alcanzó los 18 mil millones de dólares, un repunte interanual del 10,9 %. Además, el Índice de Gestores de Compras (PMI) en julio llegó a los 54,7 puntos, el nivel más alto desde noviembre de 2018.

Al respecto, Phan Thi Thang, viceministra de Industria y Comercio, afirmó lo siguiente: “Con estos indicadores podemos atestiguar una fuerte recuperación de la producción industrial en comparación con 2023. La industria manufacturera ha vuelto a desempeñar un papel destacado en la economía. La capacidad de producción de las empresas industriales nacionales se ha recuperado muy positivamente, y están listas para aprovechar las oportunidades de acceso a nuevos mercados en el futuro”.

Dichos progresos abren perspectivas para el crecimiento a corto y largo plazo de la economía vietnamita. Numerosas organizaciones, instituciones financieras y expertos internacionales siguen apreciando estos logros. En particular, el Banco Asiático de Desarrollo (BAD) elevó las perspectivas económicas de esta nación del Sudeste Asiático para 2024 a un 6 %, y la Oficina de Investigación Macroeconómica ASEAN+3 prevé un crecimiento del 6,3 %, mientras el banco HSBC estima un incremento del 6,5 %. Vietnam continúa siendo un destino atractivo para los inversores extranjeros.

Takeo Nakajima, representante jefe de la Organización Oficial del Japón para el Comercio Exterior (JETRO) en Hanói, dijo lo siguiente: “Según nuestras encuestas el 70 % de las empresas con operación en Vietnam apoyan la expansión de la escala de producción con nuevos modelos de negocios. En la primera mitad de este año el número de nuevos proyectos disminuyó un 20 %, pero la inversión de empresas que llevan mucho tiempo en el mercado vietnamita tiende a aumentar”.

El primer ministro Pham Minh Chinh pronuncia su discurso directivo en la reunión ordinaria del Gobierno correspondiente al mes de julio. (Foto: VGP)

Movilizar todos los recursos para el desarrollo económico

Desde principios de 2024 el Gobierno y los organismos competentes de todos los niveles están determinados a movilizar todos los recursos para el desarrollo económico, con el propósito de cumplir y superar los objetivos trazados, especialmente lograr un crecimiento de un 6,5 %.

Entre las soluciones específicas cabe destacar las medidas destinadas a impulsar el crecimiento en todos los sectores, incluidos los motores tradicionales de la inversión, la exportación y el consumo, y, al mismo tiempo, mejorar la calidad y promover nuevos motores de crecimiento verde, desarrollando la economía circular, digital, colaborativa y del conocimiento.

También hacen falta recursos para fortalecer la producción y los negocios, crear empleos y medios de vida para las personas, continuar promoviendo tres avances estratégicos sobre el desarrollo coordinado de infraestructura estratégica, instituciones y formación de recursos humanos de alta calidad. En idéntico sentido se requieren mayores esfuerzos para fortalecer los asuntos exteriores, el comercio internacional y la integración mundial, contribuyendo así a consolidar el papel, la posición y el prestigio de Vietnam.

En la reunión ordinaria del Gobierno correspondiente al mes de julio, celebrada el 5 de agosto, el primer ministro Pham Minh Chinh enfatizó las tareas y soluciones clave en agosto, desde ahora hasta finales de año y en el futuro, diciendo: “Nuestras metas no cambian: persistir en garantizar la estabilidad macroeconómica y el control de la inflación dentro de los límites permitidos por la Asamblea Nacional. Hay que promover aún más el crecimiento, asegurar importantes equilibrios y los superávits deben ser mayores, mientras la deuda pública y el gasto excesivo del presupuesto deben estar bien controlados. En segundo lugar, necesitamos asegurar la estabilidad política, el orden y la seguridad social y la soberanía de las fronteras del país. Para ello el próximo mes debe ser mejor que el mes anterior, el próximo trimestre superior al trimestre anterior y en 2024 los logros deben ser más inclusivos y completos que en 2023”.