La Declaración de Hanói - 2023, aprobada en la conferencia AP-11, marca un hito importante en los esfuerzos de las asociaciones nacionales, y afirma la necesidad urgente de promover la solidaridad y cooperación para abordar los desafíos humanitarios que enfrenta la región.
El presidenta de la Cruz Roja de Vietnam, Bui Thi Hoa. (Foto: dangcongsan.vn)
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Compartir lecciones aprendidas y actuar juntos en la respuesta a desastres
Con el tema “Asia-Pacífico: preparación para desastres”, la conferencia cuatrienal reunió a más de 350 delegados extranjeros, entre ellos funcionarios del Comité Internacional de la Cruz Roja, de las Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja de Asia y el Pacífico, así como a representantes de determinadas asociaciones nacionales.
La conferencia AP-11 se celebró en el contexto en que esta región enfrenta mayores pérdidas debido a desastres naturales y consecuencias del cambio climático con respecto a otros continentes del planeta. Eso requiere una mayor cooperación internacional en actividades humanitarias, así como prevención de desastres. En esta ocasión, se llevaron a cabo decenas de sesiones de debate, que aportaron valiosas experiencias, conocimientos, ideas e iniciativas. En general, se sintió como se abría la esperanza de una conexión y cooperación humanitaria en la región. Bui Thi Hoa, presidenta de la Asociación de la Cruz Roja de Vietnam, evaluó: “La Asociación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, así como representantes de países y movimientos humanistas, apreciaron y confiaron en la Cruz Roja de Vietnam. Asumimos bien nuestra tarea al compartir experiencias prácticas y ofrecer abiertas discusiones para que los delegados propongan ideas en aras de encontrar enfoques más adecuados y lograr el consenso. La Declaración Conjunta, emitida posteriormente al cónclave, instó a la participación de los gobiernos, fuerzas sociales, empresas, organizaciones e individuos. El punto clave sería contribuir a la creación de recursos en preparación para responder a las calamidades naturales”.
Particularmente, Vietnam ha lanzado una iniciativa en esta conferencia que ha inspirado y promovido el papel pionero y creativo en este sentido, en busca de preparar a los jóvenes en la respuesta a futuros desastres naturales en la región.
Vietnam, país anfitrión con una rica cultura y espíritu de apoyo mutuo
Además de los resultados específicos, la conferencia AP-11 contribuyó a difundir los valores vietnamitas de la compasión, así como la identidad cultural nacional e imagen amigable del mismo pueblo vietnamita entre los delegados internacionales. Fine Tuitupou, de la Cruz Roja de las Islas Cook y Kate Forbes, presidenta del Comité de Auditoría y Gestión de Riesgos de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, expresaron: “Vietnam ha realizado excelentes preparativos para esta conferencia. Cuando llegamos aquí, inmediatamente, nos dieron la bienvenida con mucho entusiasmo. La hospitalidad la muestran no sólo los miembros de la Cruz Roja, sino también el pueblo vietnamita. Esta es la primera vez que vengo a su país, pero será uno de mis lugares favoritos”.
“Es genial la organización de la conferencia y considero “interesante” la manera de presentar la identidad cultural nacional a través de los programas artísticos presentados en la ocasión. En particular, me sorprendió y emocionó al saber que numerosas mujeres ocupan altos puestos en la Cruz Roja de Vietnam”.
Hace 25 años, la Cruz Roja de Vietnam tuvo el honor de acoger con éxito la Conferencia AP-6 y la Conferencia AP-11 es la segunda vez que el país indochino desempeña este papel de anfitrión. La exitosa organización del cónclave este año ha confirmado la disposición a contribuir a los esfuerzos comunes de la comunidad internacional en la respuesta al cambio climático, así como a ser clave en la protección medioambiental y proporcionar ayuda humanitaria internacional. La Conferencia AP-11 en Vietnam logró transmitir un importante mensaje: Los desastres naturales que enfrenta la región no son pequeños, pero si actuamos juntos, tenemos más fuerza para crear cambios positivos, contribuyendo a construir una región de Asia-Pacífico inclusiva y resiliente.