Un impacto limitado y a corto plazo

En las últimas semanas, las repercusiones del conflicto entre Israel y Hamás han afectado el valor de muchos tipos de activo, empujando a los mercados bursátiles a números rojos, con una gran cantidad de códigos de acciones que cayeron drásticamente.

La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, admite que el conflicto Israel-Hamás "es una nueva nube en el horizonte de la economía global". (Foto: EPA)

Por el contrario, el oro -tipo de activo refugio más seguro- aumentó un 3% en la transacción del 13 de octubre, y el dólar, la moneda de pago más popular del mundo, alcanzó su nivel más alto en una semana. Además, debido a los efectos del conflicto en Gaza, el gigante energético Chevron, de Estados Unidos, anunció recientemente que dejará de exportar gas natural a través del gasoducto subterráneo que conecta Israel y Egipto. Sin embargo, el precio del crudo se mantuvo estable, con casi 90 dólares por barril al terminar la sesión de negociación de la semana pasada.

Según Ben Cahill, experto en seguridad energética del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS), la reacción relativamente suave del mercado energético mundial muestra que en este momento el conflicto en Gaza tiene un impacto limitado, porque tanto Israel como Gaza no son los principales productores de petróleo del mundo.

A su vez, Paul Nolte, estratega de mercado de la empresa estadounidense Murphy & Sylvest, afirmó que actualmente los principales inversores de todo el mundo están más preocupados por si la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) seguirá aumentando los tipos de interés o no por la guerra en Gaza.

El famoso periódico económico Bloomberg (Estados Unidos) analizó un conflicto similar que tuvo lugar entre Israel y Hamás en 2014 y las fluctuaciones de los precios del petróleo en ese momento, así como el impacto del actual conflicto en la economía mundial. Dijo que los combates se limitan a la Franja de Gaza por lo que sus impactos son bastante modestos.

Por lo tanto, según los escenarios esbozados por Bloomberg, si el conflicto actual no se extiende más allá de la Franja de Gaza, los precios mundiales del petróleo sólo aumentarán un máximo de 3 a 4 dólares por barril, y la inflación media en el mundo puede aumentar en un máximo del 0,1% y el PIB mundial sólo disminuirá alrededor de 0,1 puntos porcentuales.

En la reunión anual del Banco Mundial (BM) y del Fondo Monetario Internacional (FMI), celebrada la semana pasada en Marrakech (Marruecos), los líderes de ambas entidades no parecían preocuparse mucho por el actual conflicto en Gaza. Sin embargo, la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, dijo que esta crisis aumenta la inseguridad para la economía mundial, que se ve frenada por factores frágiles: “Hemos visto fluctuar los precios del petróleo en los últimos días y también hemos sido testigos de las reacciones del mercado. Estamos siguiendo de cerca estos acontecimientos y claramente, esto indica las sombrías perspectivas para la economía mundial”.

Incertidumbres a largo plazo

El conflicto armado en Gaza no suscita preocupaciones por su impacto económico, pero según muchos expertos esto cambiará si no se controlan los enfrentamientos. El fin de semana pasado, el precio de los futuros de petróleo crudo (WTI) aumentó aproximadamente un 6% debido a que los inversores estaban preocupados por los acontecimientos impredecibles en Gaza. En el peor escenario, es decir, que el conflicto en Gaza se salga de control, Bloomberg cree que los precios mundiales del petróleo podrían aumentar hasta superar los 150 dólares por barril, provocando así que la inflación media en el mundo alcance el 6% y el crecimiento del PIB mundial el próximo año se reduzca un punto porcentual al situarse alrededor del 1,7%, el nivel más bajo desde 1982, sin tener en cuenta al periodo ocurrido durante la pandemia de covid-19 y la crisis financiera mundial de 2008.

Mientras, el economista jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, también dijo que cada vez que los precios del petróleo aumenten aproximadamente un 10%, la inflación mundial aumentará un 0,4 % y el mundo perderá 0,15 puntos porcentuales de crecimiento. La directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, advirtió de esta incertidumbre diciendo: “Lo que no está claro es si el conflicto actual en Gaza se extenderá a la región. Si esto se hace realidad, la economía mundial se verá muy afectada. También es incierto cómo terminará el conflicto actual. Lo que aconteció es desafortunado y esperamos que cesen todos los actos de violencia actuales”.

Lo que vale la pena señalar ahora es que, según muchos expertos, existen inseguridades para la economía mundial. Según el economista Brennan McKenna, del Banco Wells Fargo (Estados Unidos), el actual conflicto en Gaza acelera la desglobalización, un proceso que se ha vuelto más claro tras la pandemia de covid-19 y el conflicto en Ucrania, al tiempo que ha amenazado a la frágil recuperación económica en algunas regiones, especialmente en Estados Unidos y la Unión Europea.