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Desde los primeros días de la joven República Democrática de Vietnam, ahora República Socialista de Vietnam, se determinó que los derechos de las personas son inseparables de los de la nación.
Una realidad diferente de lo dibujado por HRMI
El criterio de que las personas son objetivos y a la vez motores del desarrollo, la industrialización y modernización del país ha sido reafirmado de modo coherente en los proyectos, lineamientos y políticas del Partido Comunista y las leyes del Estado de Vietnam.
Desde la primera Constitución de 1946, la versión de Carta Magna de 2013 dio un gran paso en lo que concierne a la legislación sobre los derechos humanos, al destinar 36 de los 120 artículos para las regulaciones respectivas, así como sobre derechos y deberes de los ciudadanos. La aprobación de esta renovada Ley Fundamental con todo un capítulo sobre los derechos humanos y los derechos y deberes de los ciudadanos, además de una serie de normas jurídicas pertinentes, son muestras evidentes de los empeños de Vietnam en garantizar y promover los derechos humanos y ciudadanos, como resaltó el profesor adjunto y doctor Tuong Duy Kiem, jefe del Instituto de Derechos Humanos de la Academia Nacional de Política Ho Chi Minh.
“La Constitución de 1992 solo tiene un artículo 50 en referencia a los derechos humanos, pero la última versión de 2013 cuenta con todo un capítulo que trata sobre el tema, y lo especial también se aborda en muchos otros capítulos de la Carta Magna. Particularmente, el artículo 3 de la Constitución habla del papel y las responsabilidades del Estado, que en realidad es la misión del Estado, que es reconocer, respetar, garantizar y proteger los derechos de las personas. Así, el gran esfuerzo del Partido y del Estado es mejorar el sistema legal porque sin ley no hay base jurídica para proteger los derechos humanos”, dijo Kiem.
De esta manera, se protegen y promueven las libertades de expresión, prensa, religión, reunión y asociación, así como los derechos de denunciar y demandar, entre otros. Sin embargo, estos derechos deben respetar los principios comunes de no violar los derechos e intereses de individuos, organizaciones y el Estado. Las acciones que van en contra de estos principios serán castigadas según lo establecido por ley en dependencia de su carácter, nivel de infracción y consecuencia.
Veeramalla Anjjaiah, experto senior del Centro de Investigaciones sobre Asuntos del Sudeste Asiático, con sede en Indonesia, en una entrevista concedida a VOV. |
El profesor asociado y doctor Nguyen Canh Thin, vicejefe del Instituto de Seguridad No Tradicional de la Universidad Nacional de Hanói, opinó: “Siempre alentamos y creamos condiciones favorables para que las personas expresen sus puntos de vista y opiniones con un espíritu constructivo. Se pueden señalar deficiencias y errores, y esto es diferente de atacar, provocar y distorsionar las cosas de modo intencional y feroz”.
En cuanto al derecho a no ser condenado a la pena capital, una de las normas de medición de HRMI, hay que afirmar que Vietnam no es el único país del mundo aplicando la pena capital. El derecho internacional no prohíbe la aplicación de la pena de muerte. El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos estipula que en los países donde la pena de muerte no ha sido abolida, sólo se puede aplicar a los delitos más graves.
Dinh Tien Dung, vicejefe del Departamento de Información Exterior del Ministerio de Información y Comunicación, destacó lo siguiente: “Muchos países, como Vietnam, en su proceso de perfeccionamiento judicial, consideran implementar el Protocolo sobre la abolición de la pena de muerte. Lo estamos considerando según nuestras propias condiciones, pero hemos sido proactivos en la implementación del referido Protocolo. En concreto, hemos reducido el número de delitos castigados con la pena de muerte en el Código Penal, de 44 a 18 desde el de 1985 hasta el de 2015”.
Reconocimiento internacional
Los esfuerzos de Vietnam en la protección y promoción de los derechos humanos han sido reconocidos mundialmente. El embajador de Australia en Hanoi, Andrew Goledzinowski, estimó que la educación de Vietnam ha mejorado, el nivel intelectual del pueblo se ha elevado, los pobladores étnicos tienen un mayor acceso al agua potable y la educación, mientras las mujeres participan cada vez más en el sistema político del país.
A su vez, Veeramalla Anjjaiah, experto senior del Centro de Investigaciones sobre Asuntos del Sudeste Asiático, con sede en Indonesia, evaluó: “Se puede decir que Vietnam ha logrado resultados notables en la protección de los derechos humanos, especialmente en la promoción del desarrollo socioeconómico del país en beneficio de la población. Ha alcanzado avances significativos en todos los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) y la puntuación de los mismos en todas las áreas es de 72,76. Además, uno de los logros destacados de Vietnam en la garantía de los derechos humanos es el trabajo de erradicar el hambre, reducir la pobreza y mejorar la calidad de vida de la gente”.
Los éxitos conseguidos por Vietnam en la materia y las evaluaciones positivas de la comunidad nacional evidencia la falta de objetividad y lo infundado de los argumentos de HRMI al respecto.