La historia de fundación y desarrollo del escenario teatral de Hanói atraviesa dos etapas diferentes: la primera viene después de la Reunificación Nacional, en 1975, y se extiende hasta 1985, y la segunda comienza cuando se iniciaron las reformas económicas del Doi Moi (Renovación), en 1986, hasta la actualidad.

Delegados al seminario para hacer balance de los 50 años del desarrollo del escenario teatral de Hanói. (Foto:  Ngọc Anh/VOV5)

La primera, entre 1975 y 1985, fue una época de gran efervescencia creativa, con obras emblemáticas de dramaturgos como Luu Quang Vu (Yo y nosotros; El alma de Truong Ba, la piel del carnicero) y Xuan Trinh (La patria de Vietnam, Verano en el mar). La segunda etapa marcó un proceso de modernización en estilo, contenido y puesta en escena, en busca de un mayor vínculo con el público actual. 

El dramaturgo Le Quy Hien explicó lo siguiente: “La reunificación nacional permitió una fusión entre las escenas teatrales del norte y del sur. En 1986, con el proceso de Doi Moi, el teatro adoptó una nueva fisonomía, acercándose más directamente a la vida social. Un claro ejemplo de ello fue el fenómeno del dramaturgo Luu Quang Vu. Hanói se enorgullece de haber dado inicio a esta etapa con una de las obras más representativas del período como 'Yo y nosotros'. A partir de 1996, con la transición del país hacia una economía de mercado, el teatro volvió a transformarse. En esta etapa surgieron los talleres de creación artística basados en experiencias reales, lo que resultó especialmente atractivo para los artistas”. 

Las obras teatrales de Hanói reflejan de manera profunda la realidad social y han ejercido una influencia positiva y duradera en el público. Muchas de ellas alcanzaron un éxito rotundo con producciones de gran impacto como "Vivir por siempre a los 17", "La última mentira", "Yo y nosotros" (Teatro Dramático de Vietnam), "La señorita Sita" (Teatro Cheo de Hanói), o "El erudito de Thang Long" (Teatro Cai luong de Hanói).

La Artista del Pueblo Bui Thanh Tram, expresidenta de la Asociación Teatral de Hanói, señaló: “Hanói ha sido siempre cuna de destacados dramaturgos como Luu Quang Vu, Xuan Trinh y Chu Thom, así como de renombrados directores teatrales reconocidos a nivel nacional, entre ellos los Artistas del Pueblo Trong Khoi, Doan Hoang Giang, Hoang Dung y Le Hung. El escenario capitalino también ha contado con figuras consagradas que han sido pilares del teatro vietnamita, como Tan Dat, Duc Thinh, Tran Vuong, Bach Lan, Bach Tuyet, Thanh Nga, Minh Hung y Le Hang. Hoy en día muchos artistas veteranos siguen comprometidos con la creación artística, mientras que las nuevas generaciones, con espíritu innovador y energía renovada, están impulsando la evolución del teatro en el contexto de la integración cultural global”.

El teatro en Hanói se caracteriza por la variedad y riqueza de sus temáticas, con producciones cuidadosamente elaboradas y concebidas desde una perspectiva renovadora. Según Nguyen Trung Hieu, Artista del Pueblo y director del Teatro Dramático de Hanói, en los últimos años la institución ha llevado el arte dramático a las escuelas, vinculando las obras con contenidos literarios e históricos del currículo escolar. El objetivo es acercar a los estudiantes al teatro desde temprana edad, fomentando así la formación del público del futuro.

Durante los últimos 50 años el teatro de Hanói ha contado con una sólida comunidad artística, que abarca desde maestros consagrados hasta nuevas generaciones. El Artista del Pueblo Nguyen Hoang Tuan, presidente de la Asociación de Teatro de Hanói, destacó: “Los teatros capitalinos han estado presentes en todos los grandes acontecimientos políticos y culturales del país. Entre  ellos, dos han recibido el Premio Ho Chi Minh y 24 han sido galardonados con el Premio Estatal de Literatura y Arte. Además, muchos otros han sido reconocidos por la Unión de Asociaciones de Literatura y Artes de Vietnam, así como por instituciones especializadas tanto a nivel nacional como en la capital”.

En los últimos 50 años críticos, teóricos, poetas y escritores de Hanói han tenido un papel clave en el desarrollo del teatro local. No solo escriben análisis, sino que también enseñan y organizan conferencias que enriquecen el debate artístico. Sus aportes han ayudado a mejorar la calidad de las obras, señalando sus puntos fuertes y débiles para que los artistas puedan perfeccionarlas.

Hanói, la capital de rica tradición cultural, es el centro artístico del país. En este recorrido los teatros capitalinos han consolidado su lugar, preservando tradiciones y adaptándose a las tendencias actuales. 

Esta ciudad ha presentado al público nacional e internacional espectáculos variados como cheo, tuong, marionetas y teatro moderno. La escena teatral capitalina sigue renovándose en estilo, forma y contenido, promoviendo valores culturales, patrióticos y humanistas que conectan con las nuevas generaciones.