Los bomberos de la ciudad de Hualien, en el noreste de Taiwán (China), donde se situó el epicentro del sismo, confirmaron que más de 70 personas permanecían atrapadas bajo los escombros. Por tanto, es probable que el número de víctimas fatales aumente en las próximas horas.
 Un edificio impactado por el terremoto del 3 de abril de 2024 en Taiwán. (Foto: AFP/VNA)
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El terremoto de magnitud 7,7 en Taiwán obligó al gobierno japonés a emitir una alerta de tsunami en la isla sureña de Okinawa, que fue suprimida por funcionarios japoneses horas después, aunque aconsejaron a la población que tomara precauciones.
El coordinador de Reducción del Riesgo de Desastres de Terremotos y Tsunamis de la Agencia Meteorológica de Japón (JMA), Shigeki Aoki, dijo:
“Según observaciones pasadas la posibilidad de que ocurran terremotos similares después de un sismo importante es de entre un 10% y un 20%, por lo que es necesario tener cuidado con el riesgo de otros seísmos la próxima semana. Especialmente en los próximos días la posibilidad de que se produzca un potente terremoto es muy alta. Si se produce un fuerte terremoto bajo el mar, hay que tener mucho cuidado con los tsunamis”.
Esta tarde, la Agencia Meteorológica de Japón reevaluó la magnitud del terremoto, elevándola a 7,7, en lugar de la estimación inicial de 7,5. Se trata del sismo más fuerte ocurrido en Taiwán en los últimos 25 años, desde el de magnitud 7,6 que se cobró la vida de cerca de 2.400 personas en 1999.