(VOVworld) - Al enterarse de que las provincias centrales sufrieron pérdidas provocadas por las lluvias y crecidas en agosto y septiembre pasados, el señor Tran Thanh Long, vecino de la casa 56 de la calle Vu Pham Ham, en Hanoi donó l0 toneladas de arroz. Con amor al prójimo y espíritu de ayuda mutua, una hermosa tradición de los vietnamitas, en el último decenio Thanh Long realizó en silencio incontables actividades humanitarias, y no para recibir elogios, sino para compartir el alimento con personas que enfrentaran dificultades.
Tran Thanh Long (i) entrega una donación de arroz a la Cruz Roja
de Vietnam para apoyar a los compatriotas centrales
Cada vez que recibe noticias sobre ciclones e inundaciones que afectan las localidades centrales, Tran Thanh Long se pone muy impaciente, ya que sus consecuencias serán inevitables para los lugareños. Nacido y crecido en esa tierra, comprende las dificultades y penalidades de los autóctonos. Aunque son laboriosos no pueden enriquecerse porque siempre deben convivir con inundaciones. Las imágenes de agricultores pequeños en lucha contra crecidas, casas anegadas y carencia de artículos de primera necesidad le impacientan. “En este momento encuentro también desafíos, sin embargo muchas personas pasan por situaciones más difíciles que yo porque perdieron sus casas, o quedaron sin techo y sufren escasez de alimentos y ropa. Cuando escuché la noticia sobre las inundaciones en el centro del país decidí ayudar a los compatriotas en esa zona con l0 toneladas de alimentos. Próximamente haré lo mismo con otras víctimas en el Noroeste”.
Como ciudadano vietnamita nadie puede hacer caso omiso a situaciones dolorosas de los pobladores de la parte central del país en la lucha contra desastres naturales para subsistir, por ello Long comparte el arroz con ellos. Conmovido ante su gesto generoso para con los compatriotas del centro, el secretario general de la Asociación de la Cruz Roja de Vietnam, Doan Van Thái dijo: “Long participó en numerosas campañas de apoyo a los compatriotas afectados por calamidades naturales en distintas partes del país. Algunas veces les entregó personalmente regalos y otras veces a través de organizaciones locales. Pensamos que su asistencia será más efectiva cuando le ayudemos a localizar lugares con afectaciones tal como es su deseo”.
Long pasó por períodos difíciles en su vida, por lo tanto comprende lo peor de la pobreza. Después de licenciarse se ganó la vida en numerosos oficios como carpintería, soldadura, excavación de pozos de agua entre otros. Dios nunca defraudó al hombre que tiene voluntad, su vida mejoró cada día, pero él no olvida los días penosos. Quizás por esto comprende la situación de los desafortunados. La familia del señor Tran Huu Nhung en la provincia de Dac Lac es muy humilde, su esposa siempre está enferma, tiene poca tierra cultivable y no puede pagar los gastos de estudio de sus hijos. Cuando Long supo por casualidad de esta situación, lo trajo a Hanoi y le ayudó a buscar trabajo. Ahora, su vida ha mejorado mucho y él se siente muy emocionado al hablar del trabajo de Long: “Long me ayudó a conseguir empleo y alojamiento e hizo lo mismo con otras personas necesitadas. Recientemente contrató un carro para limpiar la calle de Vu Pham Ham. Al encontrarme con él veo que es un hombre abierto y ejemplo para nosotros”.
Realizó silenciosamente actividades generosas en favor de los humildes quienes le partían el corazón. Para Tran Thanh Long los gestos compasivos son simplemente compartir y ayudar a personas en situación difícil.