(VOVworld) – Para los vietnamitas, la comida es una ocasión para la reunión familiar que tanto refuerza la tradición del linaje como enaltece la tradición del pueblo. Si cada miembro de la casa dedica tiempo para reunirse, aporta a la consolidación de la familia.

Después de un día de trabajo, hogares vietnamitas disfrutan conjuntamente una cena

Con 10 años de matrimonio, la familia de Nguyen Thu Trang en el barrio Thanh Tri, Hanoi, mantiene al menos una comida familiar al día. La pareja trabaja desde la mañana hasta la noche, mientras que sus hijos estudian en internados, por lo que pueden permitirse estar juntos en el desayuno y la cena. Para esta muchacha, el momento más feliz es la presencia de los 4 miembros del hogar alrededor de la bandeja de comidas, después de un día de trabajo, escuchando a los niños contarles sobre sus estudios en la escuela. Nguyen Thu Trang compartió:“Es una felicidad preparar una buena comida familiar para expresar el cariño de una mujer hacia su marido y sus hijos. Por lo tanto, en los días libres, dedico tiempo para preparar las comidas favoritas de mis niños y mi esposo, o enseñar a mi hija a cocinar manjares tradicionales, para reforzar la coherente unidad entre los miembros de la familia”.

Por su parte, Nguyen Thuy Anh, residente en la provincia norteña Nam Dinh comentó que en la etapa moderna, la gente tiene menos tiempo para su familia debido a las exigencias del trabajo. Sin embargo, si cada miembro es consciente del cultivo de la felicidad familiar, logrará que el núcleo se una en casa en las comidas.“En mi opinión, la mujer debe prestar su dedicación a la preparación de alimentos para atraer a los miembros remanentes de la familia a las comidas tradicionales, al menos la cena, porque es un buen momento para compartir sentimientos y asuntos de trabajo, con el fin de mejorar el entendimiento recíproco en la vida”.

Según Pham Thi Thuy, especialista en Ciencias Sociales y psicóloga, la comida familiar refleja el nivel de felicidad de una casa. Es también un hilo que consolida la coherencia entre los miembros de la familia, destacó Pham Thi Thuy. “En la actual etapa necesitamos saber manejar el horario para poder participar en la comidas familiares. Si nos sumergimos en el trabajo y el estudio, perderemos esta práctica significativa. En dependencia de la situación se puede encargar la preparación de alimentos al padre, la madre, los hijos y sirvientes”.

Para las mujeres vietnamitas, la preparación de una comida deliciosa es también muestra de su cariño hacia sus seres queridos

Una familia feliz es donde cada miembro puede compartir y prestarse apoyo recíproco en los asuntos sencillos. La preparación de una comida deliciosa es también un hecho que muestra el cariño hacia los padres, abuelos, hijos y hermanos. De acuerdo con Do Vu, residente en la calle Vinh Phuc, distrito Ba Dinh, ciudad Hanoi, hoy día resulta difícil concentrar a todos los miembros de una familia en tres comidas al día. Sin embargo, si todos son conscientes de la felicidad familiar, nada es imposible, dijo Do Vu.“Para cada familia de Vietnam, es una buena tradición la comida en la que participan todos los miembros después de un día de trabajo y estudio. Hay que preservar la felicidad del hogar con suficientes víveres. Las parejas jóvenes con hijos necesitan preparar regularmente las comidas familiares, porque estas revisten un significado crucial para consolidar la felicidad y alegría de la casa”.

Las comidas son espejos que reflejan la dicha familiar. El mantenimiento de ellas ha sido un rasgo cultural tradicional del pueblo vietnamita, que requiere una preservación más pro activa en la comunidad.