Sellado este domingo tras una reunión en Escocia entre la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente estadounidense, Donald Trump, el convenio estipula que la mayoría de los productos europeos, incluidos automóviles, semiconductores y productos farmacéuticos, estarán sujetos a un arancel de un 15%. Sin embargo, seguirá aplicándose una tarifa del 50% al acero y al aluminio europeos.
La UE también se ha comprometido a importar productos energéticos estadounidenses por valor de 750 mil millones de dólares, incluyendo gas natural licuado y petróleo. Además, se prevé una inversión europea de 600 mil millones de dólares en suelo estadounidense.
Ciertas categorías de bienes, como aeronaves y sus partes, sustancias químicas y productos agrícolas específicos, se beneficiarán de exenciones aduaneras.