En más de tres décadas de renovación e integración internacional, Vietnam ha avanzado mucho en su desarrollo socioeconómico, convirtiéndose en un país de ingresos medios bajos. Este resultado se debió parcialmente a la ayuda de las organizaciones no gubernamentales extranjeras.
Con este estatus, Vietnam ya no se incluye en la lista de prioridad de algunos patrocinadores, sin embargo las organizaciones no gubernamentales internacionales continúan respaldando el país indochino en sus campos de competencia, que de acuerdo con Don Tuan Phong, vicepresidente permanente de la Unión de Organizaciones de Amistad de Vietnam, son la sanidad, la educación, la agricultura, el medioambiente y la respuesta al cambio climático.
 El vicepresidente permanente de la Unión de Organizaciones de Amistad de Vietnam, Don Tuan Phong (Foto: dangcongsan.vn) |
Al respecto, Phong dijo: “El 2017 atestiguó un notable incremento de las organizaciones no gubernamentales en Vietnam. El número de las nuevas agrupaciones fue mucho más que las desactivadas en nuestro territorio. 2017 fue el último año en la realización del programa nacional sobre la movilización de la asistencia no gubernamental foránea, período 2013-2017 y según nuestra estimación, los objetivos de este programa se consiguieron de un modo impresionante”.
En los últimos 5 años, de la asistencia no gubernamental alcanzó unos mil 500 millones de dólares, dedicada fundamentalmente a proyectos encaminados a superar las consecuencias de la guerra, el cuidado de la salud comunitaria, la prevención de enfermedades y plagas, la protección medioambiental, el tratamiento de los asuntos sociales, infraestructurales y educativos, entre otros.
En aras de implementar las políticas de innovación, gracias a la política “Vietnam es amigo y socio confiable de la comunidad internacional”, la red de amigos internacionales del país indochino se ha extendido cada vez más. Actualmente Vietnam cuenta con miles de socios en todos los continentes. A través de esta red ha podido difundirse por todo el planeta la imagen del pueblo vietnamita, su historia, su cultura y política de desarrollo, sobre todo el panorama religioso, democrático, de los derechos humanos y de la soberanía nacional.
 El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se reunió con el líder partidista de Vietnam, Nguyen Phu Trong, durante su visita al país indochino en 2017 |
En una visita a Hanói, la vicepresidenta de la Organización de Veteranos estadounidenses participantes en la guerra en Vietnam, dijo que gracias a la asociación amistosa entre los dos pueblos basada en el espíritu de “dejar el pasado, mirar hacia el futuro”, se han registrado alentadoras señales en las relaciones de cooperación entre las dos naciones.
“Confío en que los diálogos y la colaboración práctica brindarán más esperanzas a ambos pueblos. Esto es una lección para el mundo, enseñándoles que enemigos en el pasado pueden ser amigos en el futuro”.
Por su parte, el secretario general de la Asociación de Amistad y Cooperación Cultural de la India, Padhihari Bijay Kumar, expresó al visitar el territorio indochino en agosto de 2017: “Nos comprometimos a estar siempre al lado del pueblo vietnamita en cualquier circunstancia a fin de vigorizar las relaciones de asociación estratégica integral, profundizar los nexos ya existentes y diversificar los actuales entre Hanói y Nueva Delhi”.
En el pasado, el presidente Ho Chi Minh dijo que para la revolución vietnamita, en cualquier situación y condición, la solidaridad internacional y el apoyo de los amigos del mundo son vitales. Estos factores tienen un significado más importante en la actual coyuntura, cuando el país enfrenta varios retos, especialmente las disputas territoriales marítimas. Esta fuerza contribuye a asegurar la confianza de los países y de las organizaciones que simpatizan con Vietnam y a crear un ambiente favorable para la causa de construir y defender la Patria.