 (Foto de ilustración: anninhthudo.vn) |
Resolver los problemas en el mar por vías pacíficas es la posición invariable de Vietnam desde hace mucho tiempo. En base a este espíritu, siempre se dispone a solventar las disputas con las naciones relacionadas mediante el diálogo y otras medidas pacíficas, en consonancia con las leyes internacionales y la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982.
Dicho de otra manera, opta por basarse en las fuerzas del pueblo y la milenaria tradición de lucha por salvaguardar la soberanía en la solución de los litigios, y muestra la responsabilidad de un país costero con reclamos territoriales dando respuestas consistentes y apropiadas.
Medidas pacíficas
Vietnam siempre rechazará categóricamente la fundación de la llamada ciudad de Sansha y otras unidades administrativas, así como las acciones violatorias realizadas por China en el Mar Oriental, las cuales son catalogadas de inválidas y perjudiciales para las relaciones entre los países y amenazantes a la estabilidad y la seguridad en la región y el resto del mundo. En realidad, Hanói ha pedido en repetidas ocasiones a Beijing respetar la soberanía de sus territorios, derogar las erróneas decisiones pertinentes y cesar los actos violatorios. El profesor y doctor Nguyen Ba Dien, presidente del Instituto de Ciencias Marítimas e Isleñas de Vietnam, estimó: “Nuestro país ha reaccionado enérgicamente ante las acciones de China. También ha reafirmado su firme postura a países y organizaciones internacionales para definir mejor los complots y las ambiciones peligrosas e ilegítimas de Beijing en el Mar del Este”.
A su vez, según el mayor general Le Van Cuong, ex jefe del Instituto de Estrategias y Ciencias del Ministerio de Seguridad Pública, Vietnam protege sus territorios soberanos en el mar basándose en la unidad de su población y el apoyo de la comunidad internacional. Aclaró: “Creo que la respuesta de Vietnam en este tema es totalmente apropiada. Tenemos el derecho de proclamar abiertamente ante 100 millones de ciudadanos de dentro y fuera del país sobre la actitud firme del Partido Comunista y el Estado de Vietnam de salvaguardar la soberanía y la integridad territorial. Esta postura es apoyada por su población así como por la comunidad internacional, además de estar conforme con las leyes internacionales. Hemos podido movilizar las fuerzas nacionales y al pueblo, premisa importante para ganar la batalla por la defensa de la soberanía nacional en el Mar del Este”.
Sin concesiones
Ante una serie de declaraciones políticas y medidas administrativas erróneas por parte de China en el Mar del Este en los últimos tiempos, Vietnam reiteró que tiene todas las pruebas históricas y fundamentos jurídicos para reafirmar su soberanía sobre los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa, también conocidos mundialmente como Paracel y Spratly, respectivamente.
Por otro lado, envió en reiteradas ocasiones a la ONU notas en las cuales declaró como ilícitos y absurdos los reclamos territoriales del vecino país cuando este último dirigió una nota a la máxima organización mundial al respecto, lo que evidencia el carácter categórico y abierto de la nación indochina en la palestra mundial en torno a las disputas en el mar. El profesor Carl Thayer, de la Universidad de Australia, opinó: “Vietnam debe crear un frente unido nacional en respuesta a esa campaña. Es necesario aclarar a la ciudadanía y la comunidad internacional la posición en torno al tema. Pienso que sabe perfectamente cómo manejarlo”.
Antes como ahora, así como en el futuro, el país indochino está decidido a proteger la soberanía nacional y la integridad territorial, apoyándose en el Derecho Internacional y el diálogo pacífico, especialmente para resolver los problemas existentes en las relaciones con China, como el tema de diferendos limítrofes en los archipiélagos de Truong Sa y Hoang Sa. Las acciones provocadoras y coercitivas del gigante asiático no pueden intimidarlo, sino que le motiva más a persistir en su objetivo adoptando medidas más determinantes y categóricas e igualmente mostrándose como un país costero responsable.