Datos publicados por la Oficina General de Estadísticas el 29 de diciembre muestran que con un crecimiento estimado del Producto Interno Bruto (PIB) del 8,02 %, y una inflación del 3,15 % (según el Índice de Precios al Consumidor promedio), 2022 exhibe la tasa de crecimiento más alta en los últimos 12 años. Se trata también del séptimo año consecutivo en que el país indochino ha controlado con éxito la inflación.
 El profesor y doctor en Economía Vladimir Mazyrin, director del Centro de Estudios de Vietnam y la ASEAN de la Academia de Ciencias de Rusia. |
Una recuperación impresionante
Los resultados de crecimiento económico de Vietnam se lograron en un contexto en que la economía mundial enfrenta grandes desafíos y alta inestabilidad. La inflación en muchos países ha subido a su nivel más alto en décadas, obligando a los mismos a endurecer sus políticas monetarias.
La competencia estratégica y geopolítica entre los principales países, el conflicto militar entre Rusia y Ucrania, junto a los desastres naturales, las epidemias y las consecuencias derivadas del cambio climático, han aumentado los riesgos para los mercados financieros, la política monetaria, la seguridad energética y alimentaria mundial.
En este escenario, la tasa de crecimiento del PIB de Vietnam del 8,02 % no es solo la más alta de su país en la última década, sino que también figura entre las más elevadas de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y la región de Asia-Pacífico.
Desde una perspectiva comercial y de mercado, el número de empresas vietnamitas recién establecidas y reactivadas superó las 208 mil, 10 veces más que durante el primer período de Doi Moi (Renovación) y un aumento de más del 30 % en comparación con el año anterior.
Desde la entrada en vigor de la Ley de Empresas en enero de 2021, se ha demostrado que se sigue fortaleciendo el espíritu emprendedor de las empresas de Vietnam y de sus poblaciones.
La inversión extranjera directa (IED) alcanzó el nivel más alto en los últimos cinco años. Esta fuente de capital se ha concentrado en el sector de alta tecnología, como contribución al propósito de que la economía vietnamita tenga una mayor profundidad en la red de suministro global.
Por otra parte, el valor de importación y exportación alcanzó un récord, hasta más de 730 mil millones de dólares, colocando a Vietnam entre las 20 principales economías con gran actividad de comercio exterior en el mundo.
El profesor y doctor en Economía Vladimir Mazyrin, director del Centro de Estudios de Vietnam y la ASEAN de la Academia de Ciencias de Rusia, evaluó: “En comparación con otros países, Vietnam logra excelentes resultados, que son reconocidos por expertos internacionales y agencias de calificación crediticia. Creo que este país puede verse como el nuevo tigre económico asiático, lo que significa un ejemplo de desarrollo exitoso”.
 La doctora Irina Korgun, directora del Centro de Estrategia Rusa en Asia. |
El éxito proviene de políticas flexibles y esfuerzos de superación
Los resultados del desarrollo económico de Vietnam en 2022 se atribuyen al papel de gestión macroeconómica flexible del Gobierno y la coordinación efectiva de la Asamblea Nacional, al promulgar numerosas políticas y soluciones oportunas y adecuadas.
Según el profesor y doctor en Economía Vladimir Mazyrin, uno de los factores que ayuda a la nación asiática a mantener sus ritmos de crecimiento económico es el éxito en atraer los flujos de capitales extranjeros. El segundo factor es la tendencia del traslado de la producción a Vietnam de las empresas, especialmente las corporaciones multinacionales.
Mazyrin señaló que la política macroeconómica flexible del Partido Comunista durante el período Doi Moi, combinada con la regulación estatal según los mecanismos mercantiles, ayuda a Vietnam a mantener la estabilidad y favorece el desarrollo económico..
La doctora Irina Korgun, directora del Centro de Estrategia Rusa en Asia, evaluó que Vietnam procura promover el crecimiento económico gracias al desarrollo industrial y la creación de su propia tecnología. La experta agregó: “Se puede decir que Vietnam sigue el camino de la industrialización al tratar de crear sectores industriales especializados y manufactureros. Este proceso comienza desde la construcción de plantas de ensamblaje más simples hasta los bienes tecnológicos más complejos. De hecho, percibimos un desarrollo orientado a las industrias de Vietnam y la estructura general de su economía”.
El profesor adjunto y doctor Vu Thanh Hung, de la Universidad de Administración de París (Francia), estimó: “La clave para el desarrollo de Vietnam es la fuerza endógena, además de una buena política de inversión, mercado laboral y empleos, así como su prioridad para los factores del desarrollo sostenible. Eso promoverá la confianza del mundo y la de la comunidad empresarial para realizar inversiones en este territorio. Pienso que eso es por lo que Vietnam no es solo un mercado para la explotación sino un socio mutuamente beneficioso”.
Para 2023, el Gobierno de Vietnam fijó un objetivo de crecimiento del PIB del 6,5 %. Según expertos, esta es una meta desafiante. Sin embargo, con soluciones integrales aplicadas por su Gobierno, Vietnam está listo para enfrentar los próximos retos y continuar implementando el objetivo de crecimiento económico establecido.