Esta tasa de crecimiento del PIB del 7,02% en 2019 es alta si se compara con otros países de Asia. Además, sus indicadores de inflación, déficit presupuestario o su tamaño de reservas de divisas se han incrementado, ayudando a mejorar la resistencia a los shocks que pueden ocurrir en el futuro.
El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Vietnam, Vu Tien Loc, dijo que los pronósticos y orientaciones desde diferentes ángulos para el cálculo general son muy importantes para que el país mantenga su crecimiento y desarrollo. Al comentar sobre el panorama de inversión en Vietnam en el período 2020-2030, Tien Loc dijo que las oportunidades radicarán en los campos con ventajas tradicionales.
“En 2020 y los años venideros, las oportunidades de inversión se encontrarán en ámbitos con ventajas tradicionales como textiles, calzado, muebles, productos agrícolas y acuáticos, turismo, entretenimiento, educación, atención médica, cadena de valor, servicios de apoyo, logística e industrias de apoyo. El potencial también radica en áreas emergentes como economía verde, economía creativa, economía digital y desarrollo urbano inteligente”, dijo Loc.
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Los economistas pronostican que cinco sectores de fuerte crecimiento este año serán bienes de consumo, el turismo, la industria de logística y transporte, la agricultura, la construcción y la industria de materiales para esta esfera. Al mismo tiempo, el punto innovador del crecimiento económico en 2020 son las empresas que explotan el mercado nacional con el poder adquisitivo de 100 millones de personas.
Nguyen Duc Hung Linh, gerente de Investigación y Desarrollo de la compañía CPCK SSI, dijo: “El núcleo del crecimiento a largo plazo de Vietnam sigue siendo las industrias que aprovechan el mercado de 100 millones de personas. Se trata de un mercado muy grande, el cual debemos desarrollar antes de expandirnos a los territorios extranjeros. La demanda del mercado para los ámbitos importantes como venta al por menor, bienes de consumo, arte, entretenimiento y educación es muy potencial, pero la escala de servicio y la calidad de las empresas vietnamitas aún son limitadas”.
Aunque la nación indochina tiene una base favorable para que la economía continúe desarrollándose, los riesgos e incertidumbres del entorno exterior, así como los desafíos y debilidades intrínsecos aún deben resolverse. Por esta razón, la reforma institucional y la eliminación de obstáculos en el ambiente de inversión y comercio son prioridades para que Vietnam logre un desarrollo económico más fuerte y sostenible en los próximos tiempos.